"La Comisión escuchará a todas las partes interesadas y puedo anunciar mi intención de lanzar una consulta pública antes del verano para avanzar en el debate sobre la neutralidad de la red en Europa", dijo la nueva comisaria de Telecomunicaciones, Neelie Kroes, durante un discurso en París cuyo contenido fue difundido por el Ejecutivo comunitario.
En todo caso, Kroes dejó claro que "hay que evitar dar respuestas precipitadas antes de haber examinado cuidadosamente los posibles problemas, si los hay, y las soluciones más apropiadas y proporcionadas". "Creo que debemos evitar en particular adoptar medidas innecesarias que puedan dificultar la aparición de nuevos modelos de negocio eficaces", resaltó.
La comisaria de Telecomunicaciones explicó que muchos operadores le han pedido "la posibilidad de cobrar una especie de alquiler a los proveedores de contenidos por lo que ellos consideran un uso extensivo de sus redes". Las empresas de telecomunicaciones también quieren "ofrecer niveles diferenciados de servicio a sus clientes, como ya vemos en muchos mercados con diferentes clases y rutas de viaje, como aviones o trenes", dijo Kroes.
Al mismo tiempo, otros actores interpretan que el principio de no discriminación que define la neutralidad de internet significa "prohibir a los operadores que impongan tasas o que lleguen a acuerdos con proveedores de contenidos que ofrecen sus servicios –servicios que consumen mucha capacidad– a través de redes de banda ancha y requieren un cierto nivel de servicio para garantizar que su transmisión sea eficaz".
"Esta perspectiva plantea una serie de problemas delicados y complejos que deben ser analizados cuidadosamente antes de que la UE dé una respuesta regulatoria", afirmó la comisaria de Telecomunicaciones, que evitó tomar claramente partido por ninguna de las dos posiciones.
A su juicio, cualquier solución normativa sobre la neutralidad de la red en la UE debe garantizar cinco principios. En primer lugar, no se debe poner en peligro la libertad de expresión. Además, "la transparencia no es negociable" y los operadores deben estar obligados a informar a los usuarios de sus sistemas de gestión de tráfico en la red para que éstos los tengan en cuenta a la hora de elegir su proveedor de Internet.
En tercer lugar, el marco regulador debe estimular las inversiones en nuevas redes. "Desplegar estas redes y promover la competencia en materia de infraestructuras puede ser la mejor manera de evitar cuellos de botella y gestores de tráfico monopolísticos, garantizando así la neutralidad de la red", afirmó Kroes.
En cuarto lugar, cualquier posible norma debe impedir que la gestión del tráfico en internet se haga de forma discriminatoria para perjudicar a competidores indeseados, como los que suministran servicios de voz a través de Internet (por ejemplo, Skype).
Finalmente, las medidas de gestión de tráfico deben servir para aumentar las inversiones en nuevas redes y no para perpetuar las actuales limitaciones de la red, insistió la comisaria de Competencia.
El ministro de Industria, Miguel Sebastián, defendió el pasado febrero que se estudie en la Unión Europea la creación de una tasa para los buscadores de internet por el uso de las redes de los operadores de telecomunicaciones. Sebastián señaló no obstante que, si finalmente se introduce esta tasa, los operadores deberán trasladar a los usuarios parte del beneficio que obtengan de los buscadores en forma de "un internet de más calidad y más barato".