El robot, que se llama Mi Doraemon, cuesta 31.500 yenes (236 euros) y tiene un tamaño reducido para que pueda ser colocado sobre la mesa del escritorio, desde donde está diseñado para interactuar con el usuario con más de 1.300 frases, e incluso llegar a mantener contacto visual con él.
Este nuevo dispositivo cuenta además con un sensor de temperatura y luz ambiental, además de un reloj interno, que permite al Doraemon desear los "buenos días" o las "buenas noches", según a la hora que sea encendido.