Esto de internet cada vez apunta más al control social orweliano.
Déjenme adivinar: en las condiciones del servicio, Google establecerá que se le concede el derecho de acceso, manipulación y uso sobre el contenido de nuestros correos, aunque asegurará que esa violación flagrante de la privacidad la perpetra por nuestro propio bien y el de su negocio.
Y, entre tanto, mantendrá el seguimiento por GPS a aquellos usuarios que tengan Android instalado.
Un saludo.