La compañía Google lanzará su servicio de televisión en Europa el próximo año, según aseguró el presidente ejecutivo Eric Schmidt el pasado viernes, a pesar de los problemas iniciales que habían llevado a algunos analistas a cuestionar el grado de compromiso que la compañía mantendría con este proyecto.
Google TV, que permite a los espectadores mezclar el contenido web y la televisión en una misma pantalla a través de un navegador, se puso en marcha en Estados Unidos en octubre pero recibió varias críticas y fue bloqueado rápidamente por tres de las principales cadenas de televisión del país.
Gran parte de la industria de la televisión, al igual que las industrias de telecomunicaciones, ven Google TV con recelo y lo acusan de robar sus ingresos por publicidad sin contribuir a los gastos de la realización de programas.
Schmidt trató de disipar los temores de la élite británica de radiodifusión en un discurso en el Festival de Televisión de Edimburgo. "Algunos sectores en EE.UU. temen que tengamos como objetivo competir con los organismos de radiodifusión o los creadores de contenido. En realidad, nuestra intención es todo lo contrario", aseguró.
"Nuestra intención es apoyar a la industria de contenidos, proporcionando una plataforma abierta para la próxima generación de televisión, de la misma manera que Android es una plataforma abierta para la próxima generación de móviles", dijo. "Esperamos que el lanzamiento de Google TV en Europa llegue el año que viene y por supuesto, Reino Unido será uno de los principales países", concluyó.
Según informa Europa Press, Google TV ha tenido hasta ahora poco éxito entre los consumidores en Estados Unidos y el proveedor de este set top box, Logitech International SA, bajó los precios a 99 dólares -unos 68 euros- en julio desde un precio inicial de 299 dólares -unos 205 euros-.
Por su parte, Schmidt también incluye una advertencia a los reguladores de la televisión británica, de quienes aseguró que eran mucho más rigurosos que sus homólogos estadounidenses, y amenaza con acallar el desarrollo de las empresas de la televisión británica en un mercado cada vez más global.
Oportunistas
Google ha sostenido durante mucho tiempo sus ambiciones en el campo de la televisión, con la esperanza de ampliar su negocio de publicidad online, con el que la compañía ganó 19.261 millones de euros -28.000 millones de dólares- el año pasado a las grandes pantallas que aún dominan la mayor parte de los presupuestos de publicidad global.
"Si su ambición era ir allí y convencer a la gente de que la televisión no es una gran amenaza, no creo que lo lograra", aseguró Keith McMahon, analista de investigación de los socios la empresa Telco 2.0/STL. "El mensaje que recibí fue que la televisión es un mercado tan grande que Google no puede ignorar. Nunca van a renunciar a ella".
Hasta ahora, Google ha tenido poco éxito al irrumpir en el mercado de la televisión, a pesar de poseer el sitio de vídeo online más popular del mundo, YouTube.
La semana pasada, sin embargo, Google llegó a un acuerdo para comprar Motorola Mobility Holdings Inc. por 8.600 millones de euros -12.500 millones de dólares-, que ofrece contenido a muchas de las empresas de televisión por cable de Estados Unidos.
Este interés por la compra de Motorola Mobility Holdings se debe a la cartera de patentes que Motorola posee, pero el negocio del set top box podría ayudar a Google a transformar su proyecto de televisión, dándole ideas sobre la televisión de pago.
Google no ha detallado sus planes para el negocio de set top box, y muchos analistas esperan que se desprenderá de esta idea a la primera de cambio por no tener experiencia ni interés previo en el funcionamiento de los negocios de hardware.
Otros creen en un cambio de rumbo en Google de la mano de su CEO Larry Page, cofundador de la compañía que tomó el relevo de Schmidt en abril y ya ha iniciado el proyecto de una red social, Google+, para competir con Facebook, mientras que ha abandonado otros proyectos.