El balance de víctimas a causa de las dos potentes explosiones que han sacudido este martes la zona del puerto de la capital de Líbano, Beirut, ha ascendido a 100 muertos y más de 4.000 heridos, según ha informado la Cruz Roja libanesa, que, además, ha publicado una alerta para pedir donaciones urgentes de sangre para atender a los heridos.
"Hasta ahora, unas 4.000 personas han resultado heridas y unas 100 han perdido sus vidas. Nuestros equipos continúan las operaciones de búsqueda y rescate en las áreas de alrededor", aseguró a Efe el portavoz de Cruz Roja, Rodney Eid.
El primer ministro libanés, Hasan Diab, ha declarado este miércoles jornada de luto oficial y ha revelado en una reunión con el presidente de la República, Michel Aoun, que un cargamento de nitrato de amonio de 2.750 toneladas sin custodiar fue la causa de la explosión, aunque se desconoce el origen.
Este miércoles es el primer día de luto nacional declarado en el país, en estado de emergencia durante dos semanas. El Consejo Supremo de Defensa libanés decretó ayer Beirut como "zona catastrófica".
La comunidad internacional ha mostrado su solidaridad con el pueblo y el Gobierno del Líbano,, que pasa por su peor crisis económica desde el final de la guerra civil (1975-1990).
El primer ministro Diab ha resaltado además que los responsables de lo sucedido "pagarán el precio", sin dar detalles sobre las posibles causas de las explosiones. "Es una promesa a los mártires y a los heridos", ha señalado, tal y como ha recogido la agencia libanesa de noticias, NNA.
Sin embargo, en una reunión posterior del Alto Consejo para la Defensa ha tildado de "inaceptable" que 2.750 toneladas de nitrato de amonio estuvieran almacenadas "desde hace seis años" en un almacén en el puerto.
Fuentes citadas por NNA han señalado que el incidente habría tenido lugar en un silo del puerto que acoge una fábrica de fuegos artificiales, mientras que el director de Seguridad Nacional, Abbas Ibrahim, ha dicho que no se pueden aclarar las causas del suceso hasta que no concluyan las investigaciones.
Ibrahim ha resaltado además que en la zona se encuentran explosivos incautados en el puerto de Beirut desde hace años, sin pronunciarse directamente sobre si han estado detrás de la potente deflagración en la zona.
Declarado el "estado de desastre"
El Alto Consejo para la Defensa ha celebrado una reunión de emergencia para abordar la situación en la que ha decidido declarar el estado de desastre en la ciudad y recomendar al Gobierno la declaratoria del estado de emergencia, tal y como ha recogido el diario libanés The Daily Star.
Tras la reunión, el presidente, Michel Aoun, ha pedido que se declare el estado de emergencia durante dos semanas y ha anunciado tres días de luto nacional y la liberación de fondos para hacer frente a la situación, incluida la entrega de dinero a los hospitales y el pago de compensaciones.
Asimismo, ha resaltado que un comité investigador deberá entregar las conclusiones en torno a las causas del desastre en un periodo de cinco días y ha anunciado la creación de una célula de crisis para abordar las repercusiones de lo sucedido, según ha confirmado la Presidencia a través de una serie de mensajes en Twitter.
Aoun ha ordenado además al Ministerio de Sanidad que garantice apoyo a las familias de las víctimas de la explosión, que ha causado daños materiales en el Palacio de Baabda, que acoge la sede de la Presidencia.
Los vídeos que circulan en redes sociales muestran una explosión y una gran columna de humo en la zona, previa a una segunda deflagración de mayor potencia que ha causado enormes daños materiales en los alrededores, llegando a escucharse en Tiro y Sidón.
EEUU, Irán, Francia e Israel ofrecen su ayuda
El Departamento de Estado estadounidense ha resaltado que está "siguiendo de cerca" las informaciones y "trabajando de cerca con las autoridades locales para determinar si hay ciudadanos estadounidenses afectados".
"Extendemos nuestras profundas condolencias a todos los afectados y estamos dispuestos a entregar toda la ayuda posible", ha dicho un portavoz del Departamento, según ha recogido la cadena de televisión estadounidense CNN. Asimismo, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, ha subrayado que la Presidencia estadounidense "está supervisando la situación".
Por su parte, el ministro de Exteriores de Irán, Mohamad Yavad Zarif, ha resaltado que "como siempre, Irán está totalmente preparado para entregar ayuda de cualquier forma necesaria".
"Nuestros pensamientos y rezos están con el gran y resiliente pueblo de Líbano", ha manifestado a través de un mensaje en su cuenta en Twitter. "Permanece fuerte, Líbano", ha añadido, junto a un corazón negro y una bandera del país.
A los mensajes de condolencias se ha sumado el Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior y Seguridad Común, Josep Borrell, que ha mostrado la "plena solidaridad" del bloque con Líbano tras las "violentas explosiones" en Beirut.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha trasladado a la población libanesa "su solidaridad fraternal". "Francia está al lado de Líbano. Siempre. La ayuda y medios franceses están en camino a la zona", ha recalcado.
Por su parte, fuentes oficiales israelíes han negado cualquier vínculo del país con lo sucedido, que ha tenido lugar en medio del incremento de las tensiones entre Israel y el partido-milicia chií Hezbolá.
Así, los ministros de Defensa y Exteriores de Israel, Benjamin Gantz y Gabriel Ashkenazi, respectivamente, han recurrido a mediadores internacionales para ofrecer ayuda humanitaria y médica a Líbano, según el diario israelí Haaretz.