"A lo largo de la noche, decenas de palestinos prendieron fuego a la Tumba de José, en Nablus. Fuerzas palestinas llegaron al lugar, extinguieron el fuego y dispersaron a los incendiarios. El Ejército israelí hará las reparaciones necesarias para permitir a los fieles visitar el lugar sagrado", informa un comunicado militar del que se hace eco Efe.
El portavoz del Ejército, Peter Lerner, añade en el escrito: "La quema y profanación de la Tumba de José anoche es una flagrante violación y una contradicción del valor básico de la libertad de culto".
"Las Fuerzas de Defensa de Israel tomarán todas las medidas para llevar a los autores de este acto despreciable ante la justicia, restaurar el lugar a su condición previa y garantizar que la libertad de culto se restablezca" en el lugar, añade.
La denominada Tumba del patriarca José es venerada desde hace siglos por cristianos, judíos y musulmanes. El Ejército israelí se retiró del sitio al principio de la Segunda Intifada, en septiembre 2000, y desde entonces quedó en manos de la Autoridad Nacional Palestina (ANP).
El mausoleo se encuentra en "zona A", donde la ANP tiene pleno control administrativo y de seguridad, de acuerdo a la división territorial establecida en los Acuerdos de Oslo de 1993.
Sin embargo, el Ejército israelí supervisa en coordinación con la ANP el acceso de fieles judíos para rezar en el lugar del cenotafio donde se venera al bíblico patriarca mencionado en el Antiguo Testamento, unas visitas consideradas por muchos palestinos como una provocación y una señal de que quieren hacerse con el lugar.