El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, advirtió hoy de que su país respondería "con fuerza" si "identifica" un intento de ser atacado como represalia por una eventual operación militar estadounidense en Siria.
"Nosotros no somos parte de la guerra civil en Siria, pero si identificamos cualquier intento de dañarnos, responderemos. Y responderemos con fuerza", dijo al concluir unas consultas con su gabinete sobre la situación en Siria, según aparece citado en un comunicado difundido por su oficina.
El pasado sábado, el ministro sirio de Información, Omran al Zubi, advirtió a Estados Unidos de que atacar su país no sería "un picnic para nadie bajo ninguna circunstancia, porque una agresión tendría graves repercusiones y sería una bola de fuego que haría arder todo Oriente Medio".
La impresión en la cúpula militar israelí es que el presidente sirio, Bachar Al Asad, no atacaría al país como represalia por un bombardeo estadounidense, como lo hizo el entonces presidente iraquí Sadam Hussein durante la primera Guerra del Golfo, según han señalado estos días fuentes militares a los medios locales.
Pese a este análisis, Washington avisará a Israel en caso de inminente ataque para que se prepare ante una eventual represalia de Damasco, según las mismas fuentes.
Los jefes militares de diez países evalúan desde ayer en Jordania y bajo un estricto secreto las opciones disponibles ante el conflicto en Siria, días después del posible uso de armas químicas, que Damasco niega. Ayer, el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, dijo que el ataque del régimen sirio con armas químicas es "real" y un crimen "muy serio" para el que su país prepara una respuesta.