El Tribunal Penal del norte de El Cairo ordenó este lunes la libertad provisional para el expresidente Hosni Mubarak por un caso de corrupción. Su abogado, Fareed El-Deeb hai informado que, tras la absolución: "Todo lo que nos queda es un procedimiento administrativo simple que no debe tardar más de 48 horas. Él debe ser liberado a finales de la semana" de la cárcel cairota de Tora.
No obstante, según han informado a Efe fuentes jurídicas, existiría la posibilidad de que Mubarak permaneciera en prisión, aunque haya expirado el plazo de detención preventiva por el caso. La agencia asegura que el Tribunal podría haber prorrogado su detención, así como la de sus dos hijos.
El juicio se ha celebrado en El Cairo, sin que el expresidente estuviera presente, tampoco sus dos hijos, Alá y Gamal, ni el exministro del Interior Habib al Adli dadas "las circunstancias excepcionales de seguridad en el país".
Además de las causas por corrupción, Mubarak deberá enfrentarse a un nuevo juicio por complicidad en el asesinato de manifestantes durante la revuelta de 2011, que acabó con su derrocamiento.
"El juicio del siglo"
El llamado "juicio del siglo" se produce después de los violentos disturbios de las últimas horas en distintas partes del país, en los que se han enfrentado simpatizantes de los Hermanos Musulmanes y del depuesto presidente Mohamed Mursi contra las fuerzas de seguridad y opositores anti-islamistas.
Durante la audiencia, el juez escuchó las peticiones de la defensa para que haya más investigaciones y sean más minuciosas, y dispuso que la próxima sesión se celebre el 21 de agosto para dar tiempo a los abogados de los acusados para que se pongan al día de las últimas pruebas presentadas. El 21 de agosto se presentarán ante la corte las últimas pruebas que se han aportado al juicio, mientras que el 25 de agosto se celebrará una sesión ordinaria.
Mubarak, Al Adli y los seis exayudantes del antiguo ministro del Interior son sospechosos de estar involucrados en la muerte de manifestantes durante la revolución que derrocó al jefe de Estado en febrero de 2011.
El expresidente también está acusado junto a sus hijos y el empresario fugado Husein Salem de corrupción y enriquecimiento ilícito.