La inacción y complacencia de la Policía egipcia ante los ataques islamistas a los coptos
Cientos de musulmanes atacaron la catedral de San Marcos, símbolo de los coptos. Los muertos y detenidos fueron todos coptos.
La complacencia de las autoridades militares, policiales y judiciales con los musulmanes en Egipto y su otra vara de medir con los coptos, la minoría cristiana maltratada durante siglos ha quedado una vez más de manifiesto. Lejos de vivir una nueva primavera tras la revolución, los cristianos viven ahora ahora más que nunca un nuevo invierno bajo el paraguas de Morsi y los Hermanos Musulmanes.
Hasta ahora la colaboración de la Policía con los musulmanes cuando han perpetrado sus ataques a los cristianos no había quedado en evidencia de manera gráfica y sólo se contaba con las denuncias de los coptos, ciudadanos de segunda en Egipto.
Sin embargo, sí existirían ya pruebas que mostrarían esta maquinaria anticristiana. Ni más ni menos que del ataque a la emblemática catedral copta de San Marcos, el signo visible más importante para los cristianos egipcios. La cadena norteamericana Fox y Mideast Christian News han publicado un vídeo en el que se muestra como la Policía permite e incluso colabora en el ataque a un templo abarrotado en el que se estaba celebrando el funeral por cinco coptos asesinados por los musulmanes.
El ambiente era de una tensión máxima y el Gobierno no supo, o no quiso, adecuar las medidas de seguridad a la gravedad de la situación. De este modo, en las imágenes se llega a observar a musulmanes disparando armas de fuego, portando machetes y lanzando piedras y cócteles molotov contra los cristianos que hacían duelo ante la actitud impasible de la Policía. Del mismo modo, en otra secuencia del vídeo aparece un oficial de policía que parece ayudar a un atacante a dirigir sus ataques contra otro grupo de cristianos.
El balance de estos ataques y la defensa por parte de los coptos se saldó con dos cristianos muertos y hasta 84 personas heridas, entre ellas 11 policías. Hubo cuatro personas detenidas, curiosamente todo coptos. Y ello a pesar de que el ataque fue premeditado y organizado por parte de los islamistas cercando el templo cristiano. Las protestas por la actuación policial no han sido escuchadas, tal y como era de prever.
El ataque a la catedral de San Marcos no es más que un ejemplo, ahora con imágenes, de lo que ha venido ocurriendo en Egipto durante décadas. Clemencia con los musulmanes y dureza extrema con los coptos.
Ocurría con Mubarak y continua con Morsi. El Ejército y el sistema judicial miran a otro lado cuando se trata de ataques a los cristianos. Ejemplos como el asalto a la catedral se han producido muy a menudo, aunque no en lugares tan emblemáticos lo que puede provocar que la situación estalle a pesar de las llamadas a la calma del papa copto.
Hacia el califato islámico en Egipto
La situación de los coptos ha ido deteriorándose tras la llegada de los Hermanos Musulmanes al poder y tras la aprobación de una Constitución marcadamente islamista y que lleva a Egipto hacía un "califato islámico", tal y como denuncian los representantes de las distintas confesiones cristianas en el país.
Los obispos católicos han denunciado que "en todas partes de la constitución se encuentran clausulas, según las cuales todo ha de hacerse de acuerdo con la ley islámica".
Y la preocupación se dirige también hacía la situación de las mujeres ante el temor de que se obligue a las mujeres no musulmanas a llevar el velo islámico o legitime el matrimonio de niñas. "Los islamistas quieren aplicar la Sharia en particular a lo referente a las mujeres. Esto es muy malo para las mujeres y para los no musulmanes dentro de la sociedad", afirmaba el obispo de Luxor.
Ser cristiano en Egipto
Ser copto en Egipto es ser, en muchos casos, un ciudadano de segunda. Una persona discriminada por no ser musulmán y todo ello a pesar de que los coptos son la verdadera esencia del país, los realmente oriundos del país.
El término copto deriva de la palabra griega aigyptios (egipcio) transformado en gipt y después en gibt. Es por tanto justo asegurar que hablar de copto es decir egipcio. Sin embargo, la invasión árabe y la imposición del islam fue relegando a un segundo plano a una Iglesia fundada por el propio evangelista San Marcos en el siglo I.
Actualmente los coptos viven dispersos por todo Egipto y representan una minoría del 10 por ciento del país. Los propios coptos aseguran ser 11 millones en todo el estado, mientras que las autoridades lo rebajan hasta los 7 millones. Están presentes en pequeñas comunidades por todo el río Nilo y también en Alto Egipto, cerca de la nueva y cristiana patria de Sudán del Sur. También existen comunidades importantes en Alejandría y en el Cairo viejo.
Lo más popular
-
Begoña Gómez miente en su primera declaración ante la Justicia: la carta de recomendación sí mencionaba a Barrabés -
Aldama usó medios de Interior para investigar al inspector de Hacienda que hizo saltar la alarma sobre la trama -
Filtración contra el novio de Ayuso: la UCO descubre que el fiscal general borró los mensajes de su móvil -
'El Confidencial' responde a 'The Objective' y le advierte con posibles acciones legales -
La última gran mentira de Marlaska: las negociaciones para entregar puertos y aeropuertos a Mossos y Ertzaintza
Ver los comentarios Ocultar los comentarios