El pasado domingo una impresionante marea humana de más de un millón de personas desbordó las principales avenidas del centro de Hong Kong, en una multitudinaria protesta en defensa del marco de libertades del que goza la excolonia británica, cada vez más en entredicho por la creciente influencia de la China continental.
Además, esta manifestación no ha sido la primera: en semanas anteriores se habían celebrado otras, en una oleada de protestas provocada por un proyecto de ley, impulsado por la jefa del Gobierno local, Carrie Lam, que facilitaría la extradición y la entrega a las autoridades comunistas de la China continental de los disidentes políticos en la antigua colonia.
"Si se aprobase esa ley, el modelo de 'un país, dos sistemas', que China se ha comprometido a respetar al menos hasta el traspaso final de la soberanía en el año 2047, se destruiría", dijo a Efe Monique Mok, una estudiante de literatura de 22 años que lucía una camiseta negra con el lema: "Queremos conservar nuestra democracia".
"Fuera Lam, no a la ley de extradición a China", gritaban en cantonés los manifestantes que enarbolaban también carteles como "Libre Hong Kong" o "No a la brutalidad policial", mientras caminaban pacíficamente entre los grandes rascacielos de la isla que alberga el centro de la ciudad.
Lam pide disculpas, pero no da marcha atrás
Por su parte, la jefa del Gobierno de Hong Kong pidió este martes disculpas a sus ciudadanos, pero no retiró definitivamente el polémico proyecto de ley de extradición que ha sido la espoleta que ha hecho estallar las multitudinarias protestas.
"Ofrezco mis más sinceras disculpas a la gente de Hong Kong. Asumo mi gran parte de responsabilidad en el conflicto que se ha creado", indicó Carrie Lam. En una esperada rueda de prensa, la líder hongkonesa ha asegurado también que "la gente ha expresado de manera pacífica lo que quiere, y lo he escuchado alto y claro. Les he escuchado muy atentamente y me han hecho ver que tengo mucho que hacer, especialmente escuchar más", dijo Lam, quien ya había pedido perdón a través de un comunicado tras la multitudinaria marcha del domingo.
Y las protestas siguen
Sin embargo, la organización civil hongkonesa que coordina a los manifestantes ha dicho que no acepta las disculpas ofrecidas por Lam, por lo que han asegurado que seguirán con las protestas.
En una rueda de prensa en una acera ante la sede del Gobierno local, la vicecoordinadora del Frente Civil de Derechos Humanos, Bonnie Leung, expresó que están "muy decepcionados" con las palabras pronunciadas por Lam, que "ha ignorado todas" sus demandas.
"El frente no acepta sus así llamadas disculpas y tendremos que seguir nuestras protestas", dijo tras lamentar que Lam no ha dimitido, no ha retirado el polémico proyecto de ley de extradición ni ha exigido responsabilidades a la policía por los incidentes violentos ocurridos durante las protestas.
El grupo ha añadido también que ahora están consensuando con representantes de los diferentes sectores sociales hongkoneses y que no anunciarán hasta este miércoles en qué consistirán las nuevas protestas. "Tenemos que ser muy prudentes a la hora de anunciar nuestras acciones", subrayaron.