El régimen de Corea del Norte ha asegurado que ha probado con "perfecto éxito" una potente bomba de hidrógeno que podría ser incorporada a un misil balístico internacional, un paso más en la escalada de su programa nuclear. La prueba ha generado un terremoto de magnitud 5,2 en la escala de Richter, seguido de un segundo temblor de menor intensidad.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha condenó "enérgicamente" estesexto ensayo nuclear de Corea del Norte. El político noruego recuerda que "se trata de otra flagrante violación de múltiples resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU"y ha instado a Pyongyang a poner punto final a su programa atómico "de forma completa, verificable e irreversible".
La Alta Representante para la Política Exterior y la Seguridad Común de la Unión Europea, Federica Mogherini, ha exigido al Gobierno de Corea del Norte que abandone de inmediato y de forma irreversible sus programas nuclear, de armas de destrucción masiva y de misiles balísticos.
Desde Francia, el presidente Emmanuel Macron, ha pedido a los miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y a la Unión Europea que respondan "rápidamente a esta nueva violación por parte de Corea del Norte del derecho internacional, del régimen de no proliferación y de las resoluciones del Consejo". El presidente también ha recordado que este último ensayo confirma la voluntad de Pyongyang de "menoscabar la paz y la seguridad internacionales", y reiteró su apoyo a sus aliados y socios en la región.
Los Gobiernos de Corea del Sur y de Japón también han condenado el ensayo nuclear y han mostrado su intención de solicitar junto a Washington una nueva reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU. Tokio y Seúl están en contacto permanente con Washington y desde el Gobierno nipón aseguran que el asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, H.R. McMaster, ha trasladado a su homólogo, que Estados Unidos está firmemente comprometido con la defensa de Japón, incluso en caso de ataque nuclear.
Rusia también se ha sumado a la condena y ha acusado al régimen de Kim Jong-un de ser una "seria amenaza para el mundo". La cancillería rusa incluso advierte de que "seguir en esta línea puede tener serias consecuencias para la propia Corea del Norte" y pide al resto de países que mantengan "la sangre fría y evitar cualesquiera acciones que continúen con la escalada de tensión".
La reacción de China, en un lenguaje similar al de anteriores ensayos nucleares, "condena enérgicamente" las pruebas nucleares y afirma que continuará trabajando "de forma inquebrantable y exhaustiva" junto con la comunidad internacional en favor de la desnuclearización de la península coreana y para mantener la paz y la estabilidad en la región.