El Gobierno de Nigeria pierde credibilidad cada día. La denuncia realizada este viernes por Amnistía Internacional para África ha colocado en difícil posición al presidente nigeriano Goodluck Jonathan. Netsanet Belay, director de Aministía Internacional África, aseguró el pasado viernes que el Gobierno nigeriano sabía con cuatro horas de antemano del ataque que iba a perpetrar la organización terrorista Boko Haram en la localidad de Chibok -cercana a Camerún- que se saldó con el secuestro de más de 200 niñas. " Es una vergüenza que el Gobierno nigeriano haya ignorado su deber de proteger a sus ciudadanos, que se han convertido en meros patos de feria durante estos ataques", criticó Belay.
Según varios testigos, la noche del 14 de abril varias patrullas ciudadanas avistaron la presencia de vehículos sospechosos y alertaron a las fuerzas de seguridad. Las autoridades políticas y militares de la región prometieron mandar efectivos para bloquear a los vehículos, pero la ayuda nunca llegó.
Cada día que pasa es un poco más complicado dar con ellas", lamenta en declaraciones a El Mundo la directora de la Asabe Kwambura, la escuela donde se perpetró el secuestro. "Las chicas podrían haber sido separadas en pequeños grupos para llevarlas en direcciones distintas y dificultar su localización", aseguraba la docente. Y es que la amenaza de los terroristas de corte islamista es clara: "Yo secuestré a vuestras hijas y voy a venderlas en el mercado, en el nombre de Dios" aseguró el pasado lunes Aboubakar Shekau, líder del grupo terrorista al que se le daba por muerto.
Ante tal despropósito, la Comunidad Internacional ha movilizado sus unidades de élite para encontrar a las niñas, antes de que sea demasiado tarde. Especialistas del FBI y del Ejército americano ya están desplegados en la zona, así como fuerzas de élite de Reino Unido y Francia.
Por su parte, Goodluck Jonathan trata ahora de solventar la incompetencia de su Ejecutivo y ya ha movilizado a dos divisiones del Ejército Nigeriano para iniciar la búsqueda de las niñas. Los soldados nigerianos están desplegados en las fronteras con el Chad, Camerún y Níger para acotar así la movilidad de los terroristas. Asimismo, el general Olukolade, portavoz de los Cuarteles de Defensa nigeriano, asegura que el Ejército nigeriano ya coordina la búsqueda con la Interpol -policía internacional- y resto de fuerzas que han acudido en auxilio de las niñas. Las autoridades nigerianas creen que las escolares no han salido del país en dirección a Camerún, tal y como aseguraban las primeras pistas, con lo que aumenta las posibilidades de encontrarlas.
El dramático secuestro ha hecho conocer al mundo este despiadado grupo terrorista. Boko Haram significa "la educación occidental está prohibida", principal preocupación del grupo islamista que trata de derrocar al Gobierno de Nigeria para someter a la población al yugo de la sharia -ley islámica-. El grupo islamista nació en los años 90 bajo el nombre de "Jama atu Ahl as Sunnah li Da'awati wal Jihad" -Personas comprometidas con la propagación de las enseñanzas del profeta y la yihad-, pero no fue hasta 2002 cuando en una mezquita de Maiduguri -al noreste del país- Mohamed Yusuf tomó las riendas de la organización bajo un nuevo nombre.
El mandato dentro de la organización de Aboubakar Shekau, líder de la organización desde 2010, se ha caracterizado por un incremento, si cabe, de la violencia. El 26 de agosto de 2011, Shekau llevó a cabo el ataque más mediático realizado hasta el actual secuestro, cuando Boko Haram voló la sede de Naciones Unidas en Abuya -capital de Nigeria-, que causó la muerte de 23 personas. Según información del Centro Antiterorista Nacional (NTCT) de EEUU hay documentadas comunicaciones así como relaciones en materia de entrenamiento y armamento entre Boko Haram, Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), el grupo somalí "Al Shabaab" y Al Qaeda en la Península Arábiga (AQAP), aunque estas relaciones son muy discutidas por expertos de otros países.
El incremento de violencia terrorista en Nigeria, llevó al Departamento de Estado norteamericano en junio de 2012 a incluir a Shekau en la lista de los terroristas más buscados y ofreció una recompensa de hasta 7 millones de dólares por su cabeza.
No existe un balance oficial de los muertos y heridos causados por los atentados de Boko Haram, aunque datos de la Agencia Nacinal de Gestión de Emergencias de Nigeria (NEMA) estima que ha provocado millones de desplazamientos, sobre todo, al norte del país donde tiene mayor actividad. Solo entre enero y marzo del presente año, cerca de 250.000 personas se han desplazado de los estados de Yobe, Borno y Adamawa. El último ataque de la organización terrorista se ha cometido este viernes, donde según la prensa local habrían muerto 30 personas al volar por los aires el puente que une Nigeria y Camerún a la altura de Gamboru.