El importante deterioro de la seguridad marítima en el Océano Índico y, especialmente, en el Cuerno de África y las costas de Somalia, debido a la multiplicación de los actos de piratería en la zona y al comienzo de los secuestros de embarcaciones como nuevo modelo de negocio, obligó a la comunidad internacional a tomar medidas en esta zona estratégica para el comercio.
Una de las primeras misiones que se ponen en marcha en la zona fue española y adoptó el nombre de Centinela Índico. El Gobierno decidió enviar en septiembre de 2008 un avión P-3 Orión del Ejército del Aire para realizar labores de vigilancia, información y prevención de la piratería, así como proteger a los barcos españoles que navegasen por la zona de interés y atender las llamadas de emergencia que se pudieran producir.
Esta misión española realizó un total de 70 misiones que significaron casi 600 horas de vuelo, en las que se detectaron e identificaron un total de 25.800 embarcaciones. A la misma se pone fin una vez que la Unión Europea consensuó una línea de actuación y lanzó su primera misión en la zona.
Operación Atalanta
Liderada por la Unión Europea, la Operación Atalanta comenzó a operar en enero de 2009. Su principal objetivo es proteger a los buques del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidos con destino el cuerno de África, especialmente a Somalia, así como garantizar la seguridad del tráfico marítimo en el Golfo de Adén y monitorizar la actividad pesquera frente a las costas de Somalia.
España participa en la misma desde el mismo inicio de la misión con un Buque de Acción Marítima (BAM), que lleva a bordo un helicóptero y un equipo de infantes de marina. Además, también forma parte de ella el Destacamento Orión, con sede en Yibuti, que está compuesto por un avión de vigilancia marítima. Nuestro país es el único que tiene un avión en la zona de forma permanente.
La Operación Atalanta tenía una duración inicial de dos años, pero debido a la persistencia de la amenaza de la piratería, los países de la Unión Europea decidieron extenderla. En la actualidad, está en marcha la aprobación de la revisión estratégica que incluye una extensión del mandato de la operación hasta diciembre del 2016, periodo en el cual se pretende dar luz verde a una estrategia de salida en conjunción y buscando la sinergia con otras operaciones en la zona.
Ocean Shield
La misión de la Alianza Atlántica contra la piratería se denomina Ocean Shield. Fue lanzada en agosto de 2009 y está compuesta por dos agrupaciones navales permanentes que rotan de manera alternativa en la zona. Busca proteger el tráfico marítimo mercante en la zona y actuar como fuerza de escolta y disuasión para impedir los ataques piratas.
Las fuerzas aliadas que operan en el golfo de Adén y el océano Índico hasta el estrecho de Ormuz, están autorizadas a entrar en aguas territoriales somalíes para perseguir a los piratas en coordinación con las autoridades del país. Además, colaboran en la formación de las guardias costeras y marinas militares de los países de la zona, con el objetivo último de que en un futuro sean estos países quienes puedan encargarse de mantener la seguridad en la zona.
EUTM Somalia y EUCAP-Nestor
La Unión Europea también puso en marcha en 2010, bajo mandato español, una misión internacional destinado a formar e instruir a las Fuerzas Armadas y de Seguridad de Somalia, que se denomina EUMT Somalia. Este misión se entrenamiento se instaló en la vecina Uganda, ya que la inseguridad en Somalia no permitía llevarla a cabo allí con las garantías necesarias.
La mejora de la situación interna del país y la capacidad futura de Somalia como Estado para garantizar su propia seguridad son consideradas piezas clave en un futuro para acabar con las actividades de piratería en dicha zona. La previsión es que esta misión sea traslada a la ciudad somalí de Jazeera, al sur de Mogadiscio, en próximas fechas.
La tercera misión de la Unión Europea en la zona se denomina EUCAP-Nestor y también tiene su sede principal en Yibuti. De carácter civil, el objetivo es la asistencia, formación y asesoramiento a las autoridades de la región en materia judicial, policial y marítima con la finalidad de mejorar la seguridad marítima en la región del Cuerno de África y en los estados del océano Índico occidental, incluida la lucha contra la piratería y la gobernanza marítima. España participa con representantes desde el inicio de la misión, en julio de 2012.