Pedro Sánchez nombra embajador en Argentina pese a que Milei no se ha disculpado

El Consejo de Ministros ha aprobado este martes el nombramiento del diplomático Joaquín María de Arístegui como nuevo embajador en Buenos Aires, dando por zanjada así la crisis diplomática con el Gobierno de Javier Milei cinco meses después de la retirada de la anterior embajadora, han informado fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores.

La designación de De Arístegui, hasta ahora embajador en Colombia, se ha producido a propuesta del titular de Exteriores, José Manuel Albares, y pese a que no se ha producido la disculpa pública de Milei tras tildar de corrupta a la mujer del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

"Hemos decidido trabajar mirando hacia el futuro y teniendo siempre como guía el bienestar común de nuestros pueblos hermanos", ha justificado Albares, en una breve declaración difundida por su departamento, en la que ha sostenido que "las relaciones institucionales deben de estar a la altura de las relaciones humanas que han tejido dos pueblos hermanos como son el español y el argentino".

Argentina se alegra de que le den la razón

"Nosotros lo dijimos en su momento, para nosotros era un error quitar al embajador en su momento porque lo cierto es que nosotros siempre entendemos que las relaciones entre los pueblos están por encima de cualquier diferencia que pueda haber entre dos mandatarios a título casi personal", afirmó el portavoz presidencial, Manuel Adorni, en su habitual rueda de prensa en la sede del Ejecutivo.

"Ocurrió lo razonable y finalmente se entendió que la postura argentina era la correcta. Nada tenía que ver una cosa con la otra, cuestiones estrictamente diplomáticas con diferencias", añadió el portavoz.

Milei se burló del presidente del Gobierno, quien había apoyado públicamente en campaña a su rival Sergio Massa, en un acto de Vox el 19 de mayo: "No saben qué tipo de sociedad y país puede producir el socialismo y qué calaña de gente atornillada en el poder y qué niveles de abuso puede llegar a generar. Aun cuando tenga la mujer corrupta, digamos ensucia, y se tome cinco días para pensarlo". Dos días después el Gobierno procedió a retirar a su embajadora en Buenos Aires, María Jesús Alonso, con la excusa de que Milei había atacado a las instituciones españolas.

Esta rabieta había sido precedida por distintas declaraciones de miembros del Gobierno descalificando al presidente argentino, en las que destacó el ministro de Transportes, Óscar Puente, insinuando que Javier Milei consumía "sustancias".