Las elecciones legislativas celebradas ayer en Colombia dejan varias claves sobre lo que puede ocurrir en las presidenciales que se celebrarán el próximo 29 de mayo, con Gustavo Petro y su Pacto Histórico como favoritos. Su posible victoria amenaza con extender a este país la amenaza de la izquierda comunista del Grupo de Puebla y el Foro de Sao Paulo para implantar regímenes similares al de Venezuela, que tienen como faro a la dictadura de los Castro en Cuba.
Petro irrumpió en la Cámara como primera fuerza en número de votos aunque quedó segundo en escaños al sumar 25. En las primarias del partido llegó al 85% de apoyos de los 5,8 millones de votos en total que han participado en el proceso, lejos de los 8 millones que Petro se marcó como objetivo para hablar de éxito arrollador.
Eduardo Cader, director de Foro Madrid, la iniciativa lanzada por la fundación de Vox, Disenso, para hacer frente a la izquierda en Iberoamérica, explica en declaraciones a Libertad Digital que a pesar del éxito de Petro, los estudios previos a las elecciones le daban un resultado aún mejor por lo que se muestra "optimista" y cree posible "vencerle" en las presidenciales si la derecha logra unirse para hacerle frente.
Motivos para la esperanza
"No tiene el impulso que temíamos, ha conseguido la mitad de lo que prometió por lo que se le puede hacer frente", explica Cader, para quien la fragmentación de la Cámara y el Senado en Colombia puede ser también una ventaja para hacer de "contrapeso" a las iniciativas que Petro pueda aprobar en caso de hacerse con la presidencia del país.
La victoria deja, por tanto, cierto sabor amargo al candidato de la izquierda por no haber logrado cumplir sus propias expectativas, abriendo así una puerta a la esperanza para su posible derrota en las presidenciales que se celebrarán en el país. En Colombia hay segunda vuelta y no se descarta, incluso, un posible pacto de Equipo por Colombia de Federico Gutiérrez y Centro Democrático de Óscar Iván Zuluaga -sus rivales para hacerse con el poder- en la primera vuelta.
Con ese objetivo, el expresidente colombiano Álvaro Uribe celebra mañana un encuentro con su partido, Centro Democrático, para intentar sumar fuerzas y evitar que la izquierda gobierne el país, teniendo en cuenta la amenaza que supone la posible llegada de Petro a la presidencia como antiguo miembro del grupo terrorista M-19 y tras recibir el apoyo de los narcoterroristas de las FARC.
La amenaza para Colombia
La fundación de Vox dirigida por Jorge Martín Frías, y que preside Santiago Abascal, ha elaborado un informe en el que alerta de los peligros que supondría para la democracia en Colombia la llegada de Gustavo Petro al poder. En él advierten de que se trata de "el candidato de las FARC" y su "candidatura evidencia la amenaza comunista en Colombia y la expansión de un proyecto regional de izquierda radical" que "puede poner en riesgo la institucionalidad colombiana".
Por ello, la fundación cree imprescindible el papel que pueda jugar el poder legislativo para hacer frente a la amenaza de Petro con el objetivo de "conformar un poder legislativo que defienda la Libertad, la Democracia y el Estado de Derecho".