Desde que Pedro Castillo y el partido liderado por Vladimir Cerrón, Perú Libre, tomaron el poder en Perú hace poco menos de cinco meses, la presencia de Evo Morales se ha hecho cada vez más constante en el país -visitas, reuniones, discursos-, ante la incomodidad y protesta de buena parte de la población y los medios de comunicación.
Sin embargo, esta situación aumentó este fin de semana al conocerse la intención de Morales de encabezar una reunión en la ciudad peruana de Cusco los próximos 20 y 21 de diciembre con sindicatos, organizaciones sociales y colectivos civiles de Latinoamérica, en el marco de la segunda cumbre de Runasur, un foro alternativo a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) que tiene como objetivo articular una "América Plurinacional".
Ante este anuncio, excancilleres y exviceministros de Exteriores de Perú emitieron un pronunciamiento titulado "En Defensa de la Soberanía" en el que señalaron que "la sola convocatoria a la reunión del Cusco constituye una intromisión e injerencia inaceptables y que viola las normas fundamentales de las cartas de las Naciones Unidas y de la OEA".
Además, instan al gobierno de Castillo a impedir esta reunión "ofensiva, no autorizada y perniciosa" y aclaran que "no se puede permitir y menos apoyar a políticos extranjeros para realizar eventos que agreden nuestra independencia, soberanía y dignidad; propician la división entre peruanos y buscan la destrucción del Estado de derecho".
Excancilleres y exviceministros de RREE rechazan llegada de Evo Morales para reunión de Runasurhttps://t.co/eEjCShLrnz
— El Comercio (@elcomercio_peru) December 11, 2021
En ese comunicado, advierten que Morales busca "desmembrar al Perú otorgando a Bolivia una salida soberana al Pacífico y así conformar una nación aymara como extensión territorial boliviana". Agregan que "para ejecutar su proyecto, Morales es explícito en su desafiante convocatoria. Presenta un 'Decálogo de Runasur': fundar una 'América Plurinacional', a semejanza de la denominación que aplicó en Bolivia. Señala que sus actores serán pueblos indígenas, obreros, profesores, campesinos y académicos escogidos con la misión de captura el poder", agregan.
En una entrevista al diario El Comercio, el embajador Allan Wagner Tizón, firmante del comunicado y exministro de Exteriores, declaró que "no solamente es una cuestión de carácter ideológico, que tiene que ver con un fuerte contenido marxista leninista, sino que además tiene una connotación política muy grave". Detalló que "lo que busca es fracturar a los países (…) No sabemos hasta dónde puede llevar este afán que ellos tienen".
Pero no son los únicos que han protestado ante este intento de Evo Morales de utilizar al Perú para sus pretensiones políticas. Según el diario Correo, ex altos mandos de las Fuerzas Armadas enviaron un comunicado en el que rechazan "la continua injerencia en nuestro país" del expresidente boliviano y agregan que "no se puede permitir y menos apoyar a políticos que pretenden realizar eventos que agreden nuestra independencia y dignidad, propiciando la división entre peruanos y buscando la destrucción del Estado de Derecho".
Finalmente, ante esta presión ciudadana, uno de los organizadores, Rogelio Rivas, informó de que la reunión se había cancelado de manera indefinida y que podría buscar otro país para celebrarla. Sin embargo, Vladimir Cerrón no parece convencido de esto ya que en Twitter dijo que "todo sigue como antes, esperando la llegada de Evo Morales. El Sur lo escoltará desde su ingreso".
Runasur no se ha cancelado ni suspendido, como han informado los medios. Lo cierto es que está en evaluación, hasta ahora todo sigue como antes, esperando la llegada de Evo Morales. El Sur lo escoltará desde su ingreso.
— Vladimir Cerrón (@VLADIMIR_CERRON) December 12, 2021
La presencia de Evo Morales desde que Castillo es presidente ha provocado reacciones desde el sector político y también en la ciudadanía. De hecho, hace unas semanas, la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso peruano lo declaró "persona no grata" por "su negativo activismo político en el Perú". Además, en un sondeo hecho público a finales del octubre por la empresa Ipsos, se reveló que el 80% de los encuestados apuntó que Morales "no tiene derecho a participar en la política peruana porque es un político extranjero".