Menú

Ridículo del gobierno comunista de Perú en torno a la "renuncia" del ministro vinculado al terrorismo

Íber Maraví tardó varias horas en anunciar que había puesto su cargo a disposición del presidente después de que se lo pidiera el primer ministro.

Íber Maraví tardó varias horas en anunciar que había puesto su cargo a disposición del presidente después de que se lo pidiera el primer ministro.
El ya exministro de Trabajo peruano, Iber Maraví. | Ministerio de Trabajo @MTPE_Peru

Una de las principales críticas al gobierno comunista de Pedro Castillo en las últimas semanas por parte de la oposición y de la ciudadanía era la presencia de Íber Maraví como ministro de Trabajo, ante las numerosas denuncias e informaciones en su contra, principalmente aquellas que lo vinculaban al grupo terrorista Sendero Luminoso. Una de ellas por haber sido acusado por un delito de terrorismo en 2004.

Finalmente, el primer ministro Guido Bellido, que a su vez tiene una investigación abierta en su contra por apología al terrorismo, confirmó en la tarde de este lunes al portal Sudaca que pidió la renuncia a Maraví. Sin embargo, no quiso precisar que la razón era por esos nexos con el terrorismo. En la entrevista realizada por el periodista Juan Carlos Chamorro, argumentó que "es por el escenario político, de cómo se está tornando. Y es parte, de alguna manera, de evaluar la situación. Supongo que en el transcurso del día va a confirmar".

Sin embargo, Maraví no se pronunció durante varias horas y, de hecho, pocos medios de comunicación se animaron a confirmar la renuncia. Las dudas crecieron aún más cuando a las 9:54 pm Bellido señaló en Twitter: "Aclaro, que si bien es cierto he recomendado la renuncia del ministro de trabajo, eso no significa que él haya renunciado". Este comentario no ha hecho sino provocar numerosos comentarios en redes sociales sobre el caos y la improvisación de este gobierno.

Apenas 23 minutos después, a las 10:17pm, Maraví publicó un mensaje en el que anunciaba que había puesto su cargo a disposición del presidente Pedro Castillo.

El que se apresuró en opinar sobre la decisión de Bellido fue Vladimir Cerrón, demostrando una vez más la influencia que tiene en este gobierno.

Temas

En Internacional

    0
    comentarios

    Servicios

    • Radarbot
    • Biblia Ilustrada
    • Libro
    • Curso