"La República Argentina formalizó su retiro del denominado Grupo de Lima, al considerar que las acciones que ha venido impulsando el Grupo en el plano internacional, buscando aislar al Gobierno de Venezuela y a sus representantes, no han conducido a nada", destaca el texto.
En el mismo se pide "un diálogo inclusivo" para solucionar la crisis venezolana, "que no favorezca a ningún sector en particular, pero sí a lograr elecciones aceptadas por la mayoría con control internacional". Consideran que de este diálogo debe formar parte "la oposición en su conjunto", junto a "voces provenientes de los principales actores sociales del país, como la Iglesia, el sector empresarial y las organizaciones no gubernamentales, sin exclusiones".
"En un contexto en el que la pandemia ha hecho estragos en la región, las sanciones y bloqueos impuestos a Venezuela y a sus autoridades, así como los intentos de desestabilización ocurridos en 2020, no han hecho más que agravar la situación de su población y, en particular, la de sus sectores más vulnerables", agrega el comunicado.
La República Argentina formalizó hoy su retiro del denominado Grupo de Lima, al considerar que las acciones que ha venido impulsando el Grupo en el plano internacional, buscando aislar al pueblo venezolano y a sus representantes, no han conducido a nada. https://t.co/hOLqC3NbrH pic.twitter.com/n4XrKFDnrz
— Cancillería Argentina 🇦🇷 (@CancilleriaARG) March 24, 2021
El Gobierno argentino también critica "la participación de un sector de la oposición venezolana como un integrante más del Grupo de Lima", lo que ha provocado que se adopten posiciones que este "no ha podido ni puede acompañar".
La Cancillería destaca que "Argentina continuará sosteniendo su compromiso con la estabilidad en la región, y buscará encaminar soluciones pacíficas, democráticas y respetuosas de la soberanía y de los asuntos internos de cada Estado".
Argentina formó parte del Grupo de Lima a iniciativa del anterior Gobierno presidido por Mauricio Macri (2015-2019), y tras la asunción del Ejecutivo encabezado por Alberto Fernández la posición argentina sobre la situación de Venezuela ha tomado un rumbo diferente.
Argentina sigue participando en el Grupo Internacional de Contacto (GIC) —integrado por países latinoamericanos y europeos—, y en su última reunión del pasado 2 de febrero, el canciller argentino, Felipe Solá, reiteró que "la solución para Venezuela es de los venezolanos".