La agitada jornada comenzó muy temprano el jueves con el primer balance de las autoridades sobre lo que ocurrió el día anterior, en el que murieron siete jóvenes de entre 17 y 27 años en Bogotá y tres más en Soacha, ciudad aledaña a la capital colombiana.
Solamente en Bogotá, la caótica noche del miércoles, en la que hubo incendios de instalaciones policiales y autobuses en varios puntos de la ciudad, hubo 379 heridos, de los cuales 66 fueron impactados con armas de fuego.
La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, criticó con dureza la respuesta policial a los desórdenes y equiparó el número de heridos por disparos a los resultados de un combate. López cuestionó además el uso indiscriminado de armas de fuego por parte de miembros de la Policía a quienes pidió "reconocer con humildad" que hubo "un ataque directo a varios ciudadanos".
En la noche de este jueves el blanco de las protestas fueron nuevamente los Comandos de Acción Inmediata (CAI) de la Policía, atacados con piedras y otros objetos y obligaron en algunos casos a la intervención de unidades antimotines.
La mayor concentración ocurrió en el CAI de Villa Luz, donde trabajaban los dos uniformados involucrados en la muerte de Javier Ordóñez, cuyo fallecimiento avivó las protestas callejeras. Si bien allí hubo disturbios e incluso agitadores trataron de incendiar de nuevo la instalación policial, las situaciones más difíciles se vieron en otros barrios en los que se produjeron choques con el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) de la Policía.
En esos disturbios los manifestantes prendieron fuego y destruyeron los CAI de barrios como Las Ferias y La Macarena, e incluso volvieron a atacar lo que quedó de los de La Gaitana y Verbenal, destruidos la víspera, entre otros.
También hubo desórdenes en otras ciudades como Medellín, Cali, Barranquilla, Manizales, Pereira y Cúcuta. Sin embargo, una de las situaciones más graves sucedió en Cajicá, municipio cercano a Bogotá, donde ocurrió una asonada y la Alcaldía decretó un toque de queda por los desmanes en vigor desde las 17:00 horas.
Mujer atropellada por autobús
En medio de estas protestas, una mujer de 40 años fue atropellada por un autobús robado en Bogotá y se convirtió en la undécima víctima mortal de las manifestaciones. "Hoy tenemos que decir que causa profundo dolor el fallecimiento de una mujer, atropellada por un vándalo que participó en el hurto de un vehículo de transporte público", dijo el ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, en un balance de los sucesos.
El hecho ocurrió en el barrio de Suba, en el noroeste de la capital colombiana donde, según testigos, jóvenes armados obligaron al conductor de un autobús de servicio público y a los pasajeros a apearse y huyeron con el vehículo, pero unas calles más adelante perdieron el control y arrollaron a una mujer ajena a las protestas que caminaba hacia su residencia.