Jair Bolsonaro, de 65 años, abandonó el Palacio de la Alvorada, su residencia oficial en Brasilia, y visitó por sorpresa al menos las localidades de Ceilandia y Taguatinga, en la región metropolitana de la capital brasileña, según divulgó en sus redes sociales.
La escapada de Bolsonaro, que no consta en su agenda oficial, se produce un día después de que su ministro de Salud, Luiz Henrique Mandetta, reforzarse la necesidad de quedarse en casa, incluso para los jóvenes, y de evitar aglomeraciones para contener la pandemia.
En Ceilandia, el presidente se acercó a las puertas de un comercio e intercambió unas palabras con una mujer, en medio de una nube de curiosos que intentaba registrar el momento con sus teléfonos móviles. "Hay que trabajar porque si no, el país va a quebrar", le espetó una vecina al gobernante. "Abra las iglesias, por el amor de Dios", le pidió otra.
En Taguatinga, Bolsonaro conversó con un trabajador informal, uno de colectivos más afectados por las cuarentenas adoptadas, con mayor o menor alcance, por los gobernadores de los 27 estados del país, entre ellos el de Brasilia.
El jefe de Estado ha criticado duramente este tipo de medidas restrictivas para evitar la expansión de la pandemia y exigido la vuelta a la normalidad "inmediata" para mantener la economía a flote. "Quien tenga un empleo, que vaya a trabajar", dijo el viernes en una entrevista a TV Bandeirantes.
- Agora, Ceilândia/DF. pic.twitter.com/uGNSPoswBz
— Jair M. Bolsonaro (@jairbolsonaro) March 29, 2020
Bolsonaro también defiende la reapertura de los colegios y una cuarentena solo reservada a personas con más de 60 años y aquellas que tengan enfermedades crónicas. Vía decreto permitió que sigan en funcionamiento las casas de loterías y los templos religiosos, aunque la Justicia derribó el texto.
Brasil registra 136 muertes
El número de muertes por el nuevo coronavirus en Brasil se elevó hasta las 136, 22 más en el último día, mientras que los casos confirmados se incrementaron un 9% hasta los 4.256, según informó este domingo el Ministerio de Salud. Las autoridades sanitarias confirmaron 353 nuevos contagios en 24 horas, menos que los 487 casos que se sumaron en la víspera o los 502 del viernes.
El estado de Sao Paulo, el más rico y populoso del país, con unos 46 millones de personas, es la región más afectada por la pandemia al contabilizar 98 fallecidos y 1.451 infectados con COVID-19. Por detrás se sitúa el estado de Río de Janeiro con 17 fallecidos y 600 casos confirmados. Los datos arrojan una tasa de letalidad de la enfermedad en el país suramericano del 3,2%.