El régimen de Nicolás Maduro, al que los principales grupos de oposición y el Parlamento presidido por Juan Guaidó acusan de usurpar el poder, ha iniciado un nuevo diálogo pero sólo con un grupo de partidos minoritarios de la oposición venezolana. En esta mesa, se contempla el retorno del chavismo a Parlamento, de mayoría opositora, la renovación de autoridades electorales y la liberación de "presos políticos".
Según señaló Maduro, una de las primeras medidas será el regreso de los parlamentarios oficialistas a "la Asamblea Nacional en desacato para buscar una instancia de diálogo y superación del desacato". Dijo además que ha dejado "las puertas abiertas a todos los sectores políticos, económicos, culturales y sociales del país para el diálogo" y manifestó que le comunicó a Noruega su disposición para "retomar los puntos del diálogo que llevábamos con ellos y parte de la oposición".
El gobernante venezolano, Nicolás Maduro, afirmó este martes que buscó la mesa de diálogo con la minoría opositora, porque los sectores encabezados por Guaidó, no cumplieron "con nada de lo que se comprometieron" durante las conversaciones en Barbados. Este anuncio de la nueva mesa de diálogo llega apenas un día después de que el líder de la oposición anunciara el final de las negociaciones iniciadas por Noruega
Críticas de Guaidó
Tras conocerse la nueva mesa de diálogo, Guaidó acusó al régimen de Maduro de "tratar de distraer a los venezolanos" y le reprochó que fuera a "tomarse una foto sin ni siquiera los actores principales de cada uno de los partidos que estaban ahí" para lanzar un nuevo mecanismo que, en opinión del líder opositor, "simplemente va a alargar el sufrimiento" de los venezolanos.
Si el régimen pretendía distraer la atención de lo central, la comunidad internacional y el Pueblo de Venezuela han dado una respuesta contundente. Agradezco la gestión inmediata de la Unión Europea que reconoce única y exclusivamente a la @AsambleaVE. #ANPoderLegítimo pic.twitter.com/SrBznzDBnb
— Juan Guaidó (@jguaido) September 17, 2019
El presidente interino celebró que, "si el régimen quería confundir a alguien, la Unión Europea salió al paso muy temprano". La UE avisó este martes a Maduro de que cualquier negociación con la oposición para zanjar la crisis en Venezuela requiere "la necesaria representatividad política".
Posición de EEUU
El Gobierno de EEUU menospreció los acuerdos que el chavismo y un sector minoritario de la oposición firmaron el lunes y dijo que cualquier diálogo debe incluir a Guaidó. "Maduro y sus compinches atrajeron a un pequeño grupo marginal de políticos a participar en un llamado diálogo y lo distorsionó como si hablaran en nombre de la oposición democrática", afirmó en un comunicado el Departamento de Estado.
"Cualquier negociación seria —añadió— debe darse entre el antiguo régimen y el presidente interino Guaidó", dijo EEUU, que desde enero considera a este líder opositor como mandatario legítimo de Venezuela.
Según Washington, "Maduro saboteó las negociaciones facilitadas por Noruega, negándose a comprometerse seriamente en el retorno a la democracia en Venezuela" y demostrando su "rechazo a negociar de buena fe". "De nuevo, el régimen ve las negociaciones como una táctica dilatoria y ha minado los esfuerzos de buena fe para encontrar una solución política pacífica", añadió.