Dentro de sus numerosas actividades, Carlos Alberto Montaner viajó a Perú para participar en la Feria Internacional del Libro de Lima (FIL 2019) en una charla dedicada a la política y el futuro de la región. Ahí, junto a Mario Vargas Llosa –en cuyo nombre se basó la temática de la cita literaria– y Andrés Oppenheimer, pudo insistir en sus posiciones respecto a la izquierda y a varios de sus gobiernos.
En la capital peruana, Montaner se dio un tiempo para recibir a Libertad Digital y hablar de lo que ocurre en Latinoamérica y en especial del nuevo panorama político. Y es que en los últimos años ha sido evidente la desaparición de gobiernos que apoyaron al régimen de Nicolás Maduro: Argentina giró a la derecha con Mauricio Macri, Ecuador se alejó de la ideología chavista con Lenín Moreno y Brasil decidió elegir a un Jair Bolsonaro, un hombre que se ubica en las antípodas del chavismo. Este claro giro en los gobiernos de la región debilitó a Maduro.
Sin embargo, México parece ser la excepción con la presidencia de Andrés Manuel López Obrador. Para Montaner, "lo asombroso es que la experiencia no sirve de nada" y que "el fracaso del socialismo real no ha servido de mucho". Por eso apunta que López Obrador "es un buen ejemplo de cómo incurrir en los viejos errores no significa nada y tratar de imitar del desastre venezolano, tampoco significa nada". En ese sentido cree que es "muy grave, porque lo que evidencia es el carácter autista de la sociedad latinoamericana". Pero el escritor y periodista cubano no pierde la esperanza: "Esperemos que eso, en un tiempo, cambie".
Sobre México también apunta que la victoria de López Obrador no sólo se debe al fracaso de anteriores gobiernos, ahogados en casos de corrupción e impotentes ante el avance del narcotráfico: "Todo eso influye mucho. El narcotráfico es la expresión de la falta de ley y la falta de recursos morales más importantes que uno puede encontrar en Latinoamérica".
La crisis venezolana
Viajando algo más al sur del continente, Venezuela también forma parte fundamental de la actualidad que toca Montaner. Cuando se cumplen este martes 23 seis meses de la presidencia interina de Juan Guaidó, el periodista ve ciertos cambios en la situación del opositor y sobre todo en su posición ante las conversaciones de Oslo: "Yo creo que se ha debilitado un poco pero, a mi juicio, no tenía otro remedio que participar en las conversaciones de Barbados o de Noruega porque se lo demandaba EEUU o la Unión Europea".
Además, recuerda las palabras de Guaidó, sin dejar de entender su posición sobre el diálogo: "Imponía un tipo de conducta que era evidentemente contraria a sus propios pronunciamientos. Cuando decía que no iba a hablar con un régimen que haría trampas y lo que quería era prolongar su estadía en el poder, lo que decía era correcto. ¿Por qué se sienta entonces? Porque no le queda más remedio".
Tampoco deja de recordar la participación de la dictadura castrista en Venezuela: "El régimen cubano le da mucho más que apoyo ideológico: le da un apoyo con sus cuerpos de inteligencia, ayuda mucho al sistema". Pero también recuerda quién sostiene a Maduro en el poder: "Es el Ejército, su cúpula. En el momento en que eso se pierda, cambiará, porque los soldados de baja graduación están desesperados porque Maduro salga del poder y se enderece la situación y cese la migración en masa".
La corrupción al descubierto
La constructora brasileña Odebrecht ha sido una de las empresas más mencionadas en los últimos dos años en Latinoamérica y no exactamente por sus obras, si no por haber creado una red de corrupción en la que ha involucrado a muchos políticos. Perú es un triste ejemplo de eso. Por relación a ese caso –llamado Lava Jato– están siendo investigados expresidentes, excandidatos, exalcaldes, exfuncionarios públicos y hasta empresarios, algunos de los cuales incluso están en prisión preventiva.
Todo esto no deja bien parada a la clase política peruana, pero Montaner lo tiene claro: "La clase política es una expresión de la sociedad. No se puede tener una clase política honorable y decente si no lo es el conjunto de la sociedad. El problema es sistémico, tiene que ver con los valores prevalecientes, con la actitud y con la adecuación del Estado y la sociedad. Si esta ve que el estado no le sirve, va a saquearlo. Si es lo contrario, entonces va a cuidarlo. Ahí es lo importante".
Por eso cree que "la cosa va mucho más allá de meter a la cárcel a los expresidentes corruptos. Hay que hacer una evaluación general del sistema. Hay que tener salarios adecuados, porque de lo contrario es más fácil para ellos justificar la corrupción. Hay que resolver el tema de que el Estado debe ser considerado como algo en beneficio de los ciudadanos. La razón por la que en EEUU, Inglaterra u Europa del Norte hay menos personas corruptas es porque el Estado funciona a favor de ellos. Tan sencillo como eso".
La conversación no podía acabar sin una pregunta acerca de su producción literaria. En 1996, Montaner escribió el "Manual del perfecto idiota latinoamericano" junto al colombiano Plinio Apuleyo Mendoza y al peruano Álvaro Vargas Llosa. 11 años después, en 2007, quisieron ampliar sus conceptos con "El regreso del idiota". Pasados 12 años desde esa segunda obra, la pregunta era obligada. ¿Se cerrará el círculo con un tercer libro sobre el tema? Pero sobre todo, ¿qué nombre le pondría? Carlos Alberto Montaner lo tiene claro: "Yo creo que Plinio le puso el nombre correcto: 'Nosotros somos los idiotas'".