Los cinco países latinoamericanos se reunirán en los márgenes de la Asamblea General de la ONU para sellar esa comunicación dirigida a la Fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI) para que analice posibles crímenes de lesa humanidad cometidos en Venezuela.
La misiva de los cinco cancilleres irá acompañada de dos informes, uno elaborado por la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU (OACDH), en el que se documentan ejecuciones extrajudiciales, entre otras violaciones de derechos humanos. El otro informe es el que redactó un grupo de expertos designado por el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro.
Ese grupo de expertos concluyó que existía un "fundamento razonable" para considerar que once individuos, entre ellos el presidente venezolano, Nicolás Maduro, y miembros de las Fuerzas Armadas supuestamente habían cometido crímenes de lesa humanidad y, por tanto, podían ser denunciados ante la CPI. Almagro ya remitió ese informe a la fiscal de la CPI, Fatou Bensouda, en mayo para pedirle que abriera una investigación.
Este lunes, el canciller venezolano, Jorge Arreaza, denunció que este movimiento de los cinco países es parte de una estrategia para "agredir" al Gobierno y al presidente Nicolás Maduro.