Nicolás Maduro vuelve a la carga. El presidente de Venezuela ya no sabe qué hacer para llamar la atención. Ahora ha decidido lanzar un mensaje en vídeo en lenguaje de signos. El tirano quiere hacerse "escuchar" cómo sea. Él mismo ha reconocido que "aunque no lo deseen, lo van a oír porque va a seguir hablándoles como sea".
Maduro ha publicado el vídeo en su cuenta oficial en la red social Twitter este domingo. En lenguaje de signos y subtitulado, el dictador, trata de transmitir un mensaje de "unión y paz para los venezolanos". "Queremos una Venezuela unida, queremos una Venezuela en paz. Queremos una Venezuela para todos. No necesitamos levantar la voz para decirlo: juntos todo es posible", ha indicado Maduro.
En el mismo aparece presentándose y enviando un saludo, antes de que la ministra para los Pueblos Indígenas, Aloha Núñez, destaque: "Queremos paz, queremos unidad. Queremos una Venezuela para todos".
Posteriormente, el vicepresidente, Tareck el Aissami, se dirige a "jóvenes, mujeres, adultos mayores, niños, adultos", y la esposa de Maduro, Cilia Flores, señala: "Tenemos un gran líder, yo lo conozco bien".
"Juntos todo es posible. Un abrazo para todos", remacha Maduro. El vídeo ha sido grabado en el Palacio de Miraflores y el Parque Ezequiel Zamora, entre otros lugares de la capital, Caracas, según publica Europa Press.
Zapatero al lado de su ¿amigo? Nicolás Maduro
Venezuela atraviesa su peor crisis económica y social y justo cuando Nicolás Maduro ha bloqueado las pensiones a los venezolanos jubilados que residen en España, y el expresidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, sigue al servicio del Chavismo. ZP continúa en su empeño de convencer a la oposición venezolana para que firme el acuerdo con el régimen chavista. Sin embargo, el mandatario dominicano, Danilo Medina, dijo que las conversaciones entraron en un "receso indefinido" después de que la oposición venezolana se negara a firmar un texto rubricado ya por el presidente Nicolás Maduro, por considerarlo insuficiente.
El vídeo ha sido publicado en medio de este ambiente de tensión en Venezuela después del fracaso de la última ronda de conversaciones entre el Gobierno y la oposición en República Dominicana.
Estamos ante un intento más de maquillar un crudo panorama al que se enfrentan a diario los venezolanos. El bolívar cada vez vale menos y el salario mínimo apenas da para comprar alimentos básicos. Quizás la mayoría no entiendan la lengua de signos en el que se expresa Nicolás Maduro, pero sí comprenden el lenguaje del hambre.