Minutos antes de las 15:00 hora local (22:00 en España) en el Mercado de Pirotecnia de San Pablito se registró una ola de explosiones que acabaron con la vida de 26 personas que visitaban el lugar, muy concurrido en la temporada navideña, o trabajaban allí. Otras personas murieron en los centros de salud donde fueron trasladados cuando llegaron al lugar cuerpos de Protección Civil, de bomberos y agentes estatales y federales para apagar el incendio y rescatar a las víctimas.
Entre los heridos se contabilizan 37 hombres, 25 mujeres y diez menores de edad. Sin embargo, de los 72 hospitalizados, 21 de ellos ya fueron dados de alta, dijo a Televisa el gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila. El número oficial de desaparecidos continúa siendo una incógnita, debido a la dificultad que hay para reconocer a las víctimas por la gravedad de las quemaduras. El gobernador advirtió de que, respecto a los fallecidos, "la mayoría no hay posibilidad de identificarlos físicamente".
Sin embargo, "peritos de la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía) y de la Procuraduría Estatal están haciendo exámenes de genética para identificar a las personas correspondientes", afirmó Ávila. La PGR, quien tiene la competencia en este caso, anunció que abrió una investigación por lo ocurrido, por tratarse de una violación a la Ley de Fuegos y Explosivos.
Tultepec presumía de San Pablito como "el mercado de fuegos de artificios más seguro de Latinoamérica", como afirmó el Gobierno municipal en un comunicado publicado el pasado 12 de diciembre, cuando el lugar se preparaba para las multitudinarias compras con motivo de las festividades. Esto según los datos proporcionado por el director del Instituto Mexiquense de la Pirotecnia, Juan Ignacio Rodarte, quien aseguró que el lugar tenía "puestos perfectamente diseñados y con los espacios suficientes para que no se dé una conflagración en cadena en caso de un chispazo".