La llamada "Ley de Asistencia a los Refugiados Venezolanos", presentada por el legislador del Partido Republicano Carlos Curbelo y respaldada por la republicana Ileana Ros-Lehtinen y los demócratas Alan Grayson y Debbie Wasserman Schultz, pretende proporcionar "alivio migratorio" a los venezolanos que han residido durante un largo periodo en Estados Unidos –desde antes de 2013– y que no pueden regresar a su tierra natal.
El texto, en el que se hace referencia al arresto y condena del líder opositor Leopoldo López, señala que "durante la última década, miles de venezolanos se vieron obligados a huir de la brutal dictadura de Hugo Chávez. La situación no ha mejorado bajo el mandato de Nicolás Maduro. En los últimos meses solo hemos visto innumerables ejemplos de comportamientos poco éticos y de la fuerza letal de la que hace uso su Gobierno".
Los promotores de la iniciativa explican que este proyecto de ley "ayudará a los ciudadanos venezolanos que han hecho de Estados Unidos su nuevo hogar a que permanezcan aquí si deciden que ya es peligroso volver a casa". La medida excluiría a aquellos que tengan antecedentes penales y admitirá registros hasta enero de 2019.
"No podemos forzar a los venezolanos a regresar a un país donde enfrenten arresto, tortura y ejecución solo porque se oponen al gobierno. Otorgarles estatus de residencia permanente es la manera mejor y más lógica de garantizar su seguridad", dijo Curbelo, a través de un comunicado publicado en la web de la Cámara de Representantes de Estados Unidos.