La verdadera cara de Cuba en Panamá: expulsa a los periodistas incómodos
La dictadura cubana mostró dos caras en Panamá. Por un lado, Raúl Castro posaba con Obama para la foto; por el otro expulsaba a periodistas incómodos.
Para gran parte de los medios de comunicación, el gran momento de la Cumbre de las Américas celebrada este pasado fin de semana en Panamá fue el apretón de manos entre Barack Obama y el líder de la dictadura cubana Raúl Castro, además de sus elogios mutuos. Esto generó miles de fotografías, además de largos minutos de imágenes y tertulias en las televisiones y radios del mundo. De hecho, muchos consideraron que sólo ese gesto y esa fotografía hacían que la Cumbre valiera la pena.
Sin embargo, eso fue lo que todos vieron: el lado "amable" de la dictadura. Pero hubo mucho más. El régimen castrista no pudo evitar mostrar su verdadera cara, la misma que ha tenido en las últimas décadas. Es así que poco antes de celebrar una conferencia de prensa en el Hotel Sheraton, los responsables de la delegación oficial cubana expulsaron del salón a la periodista Karen Caballero y el camarógrafo Rodolfo Hernández por pertenecer a TV Martí, un medio de comunicación de Miami y evidentemente muy incómodo para la dictadura y para los Castro.
Caballero narró que "logramos entrar, a pesar de que ellos no estaban dejando entrar a todo el mundo, pero parece que no se dieron cuenta –nosotros tenemos todas nuestras credenciales en orden– y obviamente al chequearlas pudimos sentarnos. Se formó todo ese ambiente en que tú te das cuenta que algo no está bien, y a mi camarógrafo lo sacan afuera le dicen que nos tenemos que ir y que me tiene que avisar a mí". Dijo que el que los expulsó fue el jefe de Seguridad de Prensa de la delegación oficial de apellido Nieves: "Son incongruencias nuevamente por culpa de un Gobierno que no quiere enfrentar a la libre prensa". En declaraciones al Diario de Cuba, detalló que "no hubo violencia pero no dieron más razones. En el salón estaba la prensa oficialista, Telesur y agencias preseleccionadas por la delegación cubana".
La periodista señaló que lo que buscaba era realizar una pregunta y que, como es normal, los representantes de la dictadura tendrían el derecho de responder o no, pero que ella tenía también ese mismo derecho que realizar la pregunta. El momento no pasó desapercibido por el resto de medios: "Varios medios de prensa filmaron el momento. Cuando el camarógrafo dijo que nos estaban expulsando todo el mundo lo escuchó y comenzaron a filmar. Esto en el mundo democrático no se contempla ni se entiende". Uno de las cadenas que registró el momento fue CNN en Español.
Las reacciones a este incidente no se hicieron esperar. Blanca Gómez, presidenta del Colegio Nacional de Periodista (CONAPE), declaró al diario La Estrella de Panamá que "no hay excusas para limitar el acceso a una conferencia de prensa convocada, y mucho menos cuando estamos en un país que le ha abierto las puertas a todas las corrientes, brindándole la oportunidad a todos a expresar sus ideas". Por eso apuntó que "este tipo de control mediático sólo habla de posiciones atrasadas, y nada consecuentes con nuestra realidad actual, de propugnar por una prensa libre, basada en valores como la libertad de expresión, de prensa y opinión, como pilares fundamentales para el pleno ejercicio de un periodismo objetivo".
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