Las sospechas están a la orden del día en Argentina. La muerte del fiscal Alberto Nisman –que denunció a Cristina Fernández de Kirchner de encubrir a los responsables del atentado de la AMIA– tuvo rápidamente una explicación de algunos funcionarios de Gobierno.
Apoyado por el hallazgo de un arma de fuego calibre 22 y un casquillo de bala al lado del cadáver, el secretario de Seguridad, Sergio Berni, dijo que todo apuntaba a un suicidio: "En Criminalística, cuando usted tiene un cuerpo, un arma y un casquillo, todos los caminos conducen a un suicidio. Por eso deben hacerse otros estudios cómo por ejemplo para saber si hay pólvora en la mano". Como para reforzar esta hipótesis, pocas horas después de conocerse la muerte del fiscal, el secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández, dijo que "uno tendría que tener algún elemento desconocido para saber qué pasaba por la cabeza del fiscal para tomar un hecho de estas características".
Sin embargo, durante la mañana, la fiscal Viviana Fein, a cargo de la investigación, confirmó que no se había encontrado ninguna carta de suicidio de Nisman. Agregó que "no hay testigos" directos de la muerte y anticipó que "los resultados de la autopsia estarán para esta noche" aunque los primeros datos hechos públicos por el diario La Nación revelaron que el disparo fue en la sien. Fein señaló que "hemos pedido innumerables pericias telefónicas, de cámaras de seguridad y a distintas dependencias de la Policía Federal".
Uno de los que más ha investigado la causa es Jorge Lanata, un periodista muy incómodo para el régimen kirchnerista y que en su en su programa Periodismo para todos ha destapado muchos escándalos durante los últimos años. Ahora, Lanata reflexiona sobre la muerte de Nisman y dice: "¿El tipo antes de declarar se mata? Vamos, chicos..." Para él es "como si hubiera fuerzas superiores a las fuerzas democráticas que evidentemente lo hay. El más complicado en esto es el Gobierno, no estoy diciendo que tenga responsabilidad, pero es el primero que tiene que salir a aclarar primero, porque es Gobierno y después porque es el acusado. Nisman iba a hacer una presentación muy fuerte hoy, todos esperábamos que lo de hoy sea fuerte y nuevo. Este país no tiene destino, me enteré hoy temprano".
Otro periodista, Jorge Asís, fue menos prudente. Cree que se trata de "algo mucho más que un crimen" y descartó que sea un suicidio: "Nadie puede pensar en eso porque nadie lo veía con deseos de suicidarse, se lo veía bien, sólido y muy cargado. Acá de lo que tenemos que hablar es de un asesinato". En declaraciones publicadas por el diario Clarín, se refirió a las palabras de Berni: "Él habló del lugar del crimen, entonces hay que hablar de un crimen absolutamente político (...) Yo no tengo que ser prudente. Esto es algo operado por algún sector del Gobierno que podía salir perjudicado".
Fuera de las fronteras argentinas, el conocido periodista Andrés Oppenheimer, presentador de un programa en CNN y columnista de The Miami Herald y El Nuevo Herald, señaló a través de su cuenta de Twitter que el "Fiscal Nisman me respondió un e-mail el sábado. Decía que 'obviamente' le interesaba hacer una entrevista esta semana. Parecía muy decidido!".