En las últimas dos décadas, Perú ha sido uno de los países con mejor salud económica de la región, con tasas de crecimiento promedio que han superado los 5 puntos. Sin embargo, diferentes circunstancias han hecho que en abril, mayo y junio de este año este índice apenas rondara el 2%. Estos resultados han hecho que muchos se pregunten si el "milagro peruano" ha iniciado su caída. Incluso desde Europa se ha cuestionado el asunto: la BBC publicó un informe al respecto en el que señala que "la economía peruana acaba de lanzar un paquete de reactivación que ha abierto signos de interrogación sobre su futuro".
Como era de esperar, eso hizo que muchos actores políticos saltaran a la primera línea informativa para criticar al presidente Ollanta Humala y la dirección de su política económica. Uno de ellos, sin duda el principal por sus planes electorales de 2016, fue Alan García. A través de su cuenta de Twitter dijo que era "muy lamentable" que el Perú fuera noticia en la BBC por esa circunstancia y días antes apuntó que "el país es distinto porque ya no crece. Nuevos programas de palabra, ofertas, pero pocas obras, poco empleo, más inseguridad".
Lo que aparentemente intenta el expresidente es comenzar poco a poco su campaña para 2016 y las redes sociales han sido por el momento su canal preferido. Sus mensajes están en su enorme mayoría dirigidos a criticar el Gobierno y resaltar lo que, según él, hizo correctamente durante su gestión. Se trata de datos de su segundo periodo como presidente (2006-2011) ya que en el primero de ellos (1985-1990) dejó un país en la bancarrota total, con una inmensa deuda, enfrentado con organismos internacionales como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, y un terrible avance del terrorismo.
Además de eso, García sigue en diversos problemas. Uno de ellos es el relacionado con la megacomisión que lo investiga en el Congreso peruano –que su partido trata de neutralizar a través de la Justicia– y que incluye, entre otras cosas, una serie de conmutaciones de penas carcelarias e indultos a favor de narcotraficantes, algunos de ellos reincidentes. Además, una nueva polémica ha surgido por las dudas sobre sus títulos universitarios. En el Perú es llamado "Doctor García" sin que nadie encuentre hasta el momento su título en registros universitarios. Su reacción fue corta: "Tonterías. Soy abogado titulado (1972), Magister (2004) y seguí cursos de Doctorado (72-77). No presumo de Títulos ajenos y cumplo la ley".
Sus aspiraciones son claras. Busca ser presidente por tercera vez y es posible que vea entre sus obstáculos a Nadine Heredia, esposa de Ollanta Humala, quien además es presidenta del oficialista Partido Nacionalista Peruano. La primera dama peruana se hace muy presente en las actividades del Gobierno de su esposo y según algunas fuentes tiene influencia en sus decisiones. En cada juramentación de los ministros se hace presente detrás del presidente. Eso, como era de esperar, incomoda a los rivales políticos de la actual administración y no es casualidad entonces que después del anuncio del ministro de Economía sobre las medidas para una reactivación económica y de los planes mencionados por Humala en su discurso ante el Congreso del 28 de Julio, día nacional del Perú, Alan García señalara que "regalar billetes sin crecer huele a reelección", en referencia a una posible postulación de Heredia a la presidencia.
Pero el tema es viejo y ya se tocó hace varios meses. Sin embargo, el objetivo de García es devolverlo a la agenda política y por ahora ha tenido éxito. Muchos olvidaron los importantes anuncios de Humala –en especial en educación y salud– y comenzaron a indagar sobre la posibilidad de que el Gobierno encuentre la manera de que Heredia sea candidata en 2016, pese a que la Ley Orgánica de Elecciones prohíbe la postulación a familiares directos del jefe de Estado.
Lo que parece claro es que Alan García seguirá atacando al Gobierno e insistiendo sobre lo que ha llamado "reelección conyugal", buscando que sus asuntos vayan diluyéndose en informaciones secundarias en la prensa peruana. Es posible que lo haga pese a que el oficialismo ya ha descartado que la primera dama vaya a ser la candidata de la alianza Gana Perú para las elecciones presidenciales de 2016.
Y mientras el líder del APRA mantiene su particular lucha, otros posibles candidatos no se quedan atrás. Keiko Fujimori, cuyos planes parecen centrados principalmente en plantear la liberación de su padre, también salió a criticar a Humala por su discurso. Poco después de celebrar el cumpleaños de Alberto Fujimori en su "cárcel dorada", señaló que fue "un mensaje opaco e incoherente" y recalcó que había sido "una gran pérdida de oportunidad".
Pero la fujimorista tiene también sus problemas. Hace pocos días, la Policía peruano encontró 500 kilos de cocaína de alta pureza dentro de un vehículo de campaña de un candidato de Fuerza Popular, su partido. Keiko Fujimori, en declaraciones publicadas en el diario Perú 21, dijo que había que respetar su presunción de la inocencia: "No ha tenido ningún antecedente al momento de ser candidato. Ha sido un vecino ilustre, dos veces regidor y presidente del Comité Cívico en Barranca (población a 175 kilómetros al norte de Lima), por ello contaba con el respaldo de todo el partido".
Con este panorama, la política peruana tiende a enturbiarse siempre un poco más y estos dos últimos años de Gobierno de Humala serán sin duda complicados, en especial por la preocupación de los peruanos acerca de temas algo olvidados como la seguridad ciudadana y el narcotráfico.