Como ocurrió en las primeras semanas después de su operación en La Habana el 11 de diciembre, los datos sobre la situación de Hugo Chávez son escasos y casi nulos. Esto no ha hecho sino avivar la incertidumbre de la población –en especial de la chavista– y también los rumores.
Hace unos días, el vicepresidente Nicolás Maduro dijo que Chávez estaba recibiendo "tratamientos complementarios" de quimioterapia aunque como siempre destacó que el gobernante tenía "una fortaleza superior". Por su parte, Evo Morales –quien intentó visitarlo dos veces, tanto en La Habana como en Caracas, sin éxito– admitió que "en estos momentos" estaba "bien" pero que "rápidamente tiene problemas", aludiendo a las recaídas en su salud.
Estas informaciones, cada una más confusa que la otra, agregan que el presidente sigue en el Hospital Militar de Caracas, aunque otros medios, como el diario ABC, aseguraba que ya había sido trasladado a su casa de La Orchila, a unos 160 kilómetros de la capital venezolana, después de que un nuevo examen médico mostrara un nuevo tumor en el pulmón.
Este mismo lunes, el ministro de Comunicación de Venezuela, Ernesto Villegas, rechazó este extremo y en declaraciones a la estatal Venezolana de Televisión (VTV) se preguntó: "¿Cómo nosotros vamos a prestarnos? ¿Cómo las hijas de alguien, quítate tú el nombre del comandante Chávez, se van a prestar para las cosas espantosas que dicen en esas llamadas redes sociales e incluso en algunos periódicos?".
Dudas y movimientos de la oposición
Hace unos días, el líder opositor Henrique Capriles advirtió que "en los próximos días el país conocerá la verdad" sobre la salud de Chávez: "Vamos a ver cómo le explican al país en los próximos días de todas las mentiras que han dicho sobre la situación del presidente''. El gobernador de Miranda acusó a Nicolás Maduro de "engañar reiteradamente" a toda la ciudadanía sobre la "situación real".
Justamente por eso, cientos de simpatizantes de la oposición marcharon este domingo por el centro de Caracas para apoyar al medio centenar de estudiantes universitarios que se encuentran acampados desde hace seis días junto a la sede del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela para exigir al Gobierno que revele "la verdad" sobre el estado de salud de Chávez.
Todo esto parece presionar de alguna manera al gobierno de Venezuela y para algunos podría traer nuevas elecciones en los próximos meses. Carlos Romero, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Central de Venezuela, señaló al diario El Nuevo Herald que "hay una fuerte presión por parte de algunos gobiernos y dirigentes de América Latina, inclusive de algunos simpatizantes del gobierno de Chávez, para que se defina la situación institucional en Venezuela". Para el docente, "todo parece indicar que Chávez tiene enormes dificultades para continuar como presidente de la República" y por eso, desde su punto de vista, "hay un ambiente favorable, no necesariamente buscado, para convocar nuevas elecciones".
La salida de Maduro
Lo que parece evidente es que el mismo chavismo ya tiene dificultades para ocultar lo que parece ser un secreto a voces: que la situación de Chávez no es buena. Por eso, buscan maneras para que la atención se desvíe y evitar que la opinión pública se centre únicamente en la situación del presidente.
Maduro ha encontrado la mejor manera de hacerlo: acusar a Capriles de conspirar en Estados Unidos contra el Gobierno al reunirse con banqueros prófugos y políticos republicanos. El vicepresidente dijo además que el opositor es propietario de un piso en Nueva York en el que ha permanecido unos días durante un viaje a Estados Unidos, haciendo escala en Miami: "Qué hace este señor conspirando, planeando en Nueva York y no atendiendo sus problemas en Miranda, y decimos ¿dónde está el pueblo de Miranda que no sale a la calle a reclamar? Si no, que se vaya de la gobernación, así de sencillo".
Capriles respondió a través de su cuenta de Twitter señalando que "ahora el problema más grave para el Gobierno de Venezuela es que estoy en el exterior visitando a mis sobrinos". Para demostrarlo publicó una foto con los dos menores y agregó que "lo que más les duele a uds fascistas del Gobierno es que informo siempre a donde voy y a que voy". Además, dijo que los miembros del Gobierno "van a Cuba a recibir órdenes de los Hnos. Castro y a regalar el dinero de los vzlanos, traidores!" para terminar dirigiéndose directamente a Maduro: "Y lo que más te duele Nicolás es que tú y tu combo viajan con dinero de los venezolanos, mi viaje lo pago con recursos propios".