Los mandatarios mundiales reunidos en el Parlamento Europeo en Estrasburgo (Francia) para despedir al excanciller de Alemania Helmut Kohl, que murió el pasado 16 de junio a los 87 años, comenzaron a presentar sus respetos ante el féretro antes del inicio de la ceremonia.
Los restos mortales, cubiertos por una bandera europea, se situaron en el salón protocolario de la Eurocámara para que aquellos que lo deseen se despidan de forma íntima y firmen en el libro de condolencias.
El féretro fue recibido en la Eurocámara, rodeada de grandes medidas de seguridad y con todas las banderas europeas y nacionales a media asta, por el presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron, y por la viuda del político alemán, Maike Kohl-Ritcher.
Los restos mortales de Kohl llegaron al hemiciclo europeo portados por ocho miembros del Wachbataillon (Guardia de honor) alemán que estarán acompañados por el Eurocuerpo.
Los invitados, la mayoría ex jefes de Estado y Gobierno y altos cargos europeos, han sido recibidos en el Parlamento Europeo por los presidentes de las instituciones europeas.
La ceremonia de homenaje a Kohl, ha comenzado a las 11 de la mañana y ha contado con las palabras, a título personal, del expresidente del Gobierno español Felipe González, el expresidente de Estados Unidos Bill Clinton y el primer ministro ruso Dmitri Medvédev.
La parte más institucional de la despedida en el hemiciclo, en cuyo centro se situará el féretro de Kohl envuelto en la bandera europea, la aportarán los discursos de los presidentes de la Comisión, el Parlamento y el Consejo Europeo, Jean-Claude Juncker, Antonio Tajani y Donald Tusk, respectivamente.
Los Reyes eméritos Juan Carlos y Sofía, así como el ministro de Exteriores Alfonso Dastis, el ex presidente del Gobierno José María Aznar, y el vicepresidente de la Eurocámara, Ramón Luis Valcárcel, forman parte de la delegación española presente en el homenaje.
Entre los últimos en confirmar su presencia han estado el presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, y el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, mientras que no podrá asistir finalmente el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ni tampoco el expresidente de la Unión Soviética Mijaíl Gorbachov, que se ha excusado por motivos personales.
Adiós al "canciller de la unidad"
Felipe González dijo que el excanciller alemán Helmut Kohl apostó por el proyecto de la moneda única "a pesar de que sabía que le podía costar el cargo acabar con el marco alemán".
González destacó la amistad y lealtad de Kohl, "algo raro en las relaciones políticas", y una voluntad europeísta incesante por "una Alemania europea y nunca más una Europa alemana", durante su intervención en la ceremonia de despedida al excanciller.
Resaltó igualmente que su pérdida, el pasado 16 de junio, a los 87 años, se produce "cuando más se le necesita" por las "dificultades" que atraviesa la Unión Europea.
También quiso subrayar su "sentido social de Europa" y apuntó que "nunca pensó que la dimensión social de la construcción europea fuera un estorbo para incorporar a Europa a la economía de la globalización".
El expresidente del Gobierno español recordó, además, varios episodios históricos vividos en el Consejo Europeo junto a Kohl, como la caída del muro de Berlín, y quiso agradecerle el respaldo a España para su entrada al club europeo en 1986. "No te olvidaremos", se despidió González.
"Todos tuvimos nuestras fricciones con Kohl", ha recordado la canciller Merkel -de hecho, la viuda del exmandatario, Maike Kohl-Richter, no quería que acudiera al encuentro-, "pero, sin él, mi vida habría sido diferente". "Le debemos muchas cosas que hoy damos por sentado, y nos corresponde ahora preservar su legado", ha dicho.
"Me inclino ante usted", ha culminado la canciller, "en señal de gratitud y de humildad", antes de despedirse por última vez del féretro, en pleno centro del salón de plenos del Parlamento Europeo en Estrasburgo.
El presidente francés, por su parte, ha contextualizado la figura de Kohl en un marco generacional. "Para los de mi edad, Kohl es arte y parte de la historia de Europa. Sin esa experiencia vital no estaríamos aquí, no podríamos estar haciendo lo que estamos haciendo. Actuó con coraje, con valor. Fueron acciones históricas", ha explicado antes de describir a Kohl como "un interlocutor clave, un aliado vital, un incansable creador de puentes... pero para Francia, por encima de todo, era un amigo".
"Adoraba a este hombre", ha señalado Clinton en su turno de palabra, apuntando al féretro con los restos mortales de Kohl, cubierto con la bandera de la Unión Europa. "El siglo XXI en Europa comenzó bajo su mando", ha manifestado.
"Hillary y yo le adorábamos porque era la única persona con más apetito que yo", ha bromeado Clinton antes de exhaltar la figura política del ex canciller. "Le adoraba porque quería crear un mundo sin dominadores, donde la cooperación podría arrojar mejores resultados que el conficto y donde la diversidad sería capaz de tomar mejores decisiones que los dictadores individuales".
Los restos mortales de Kohl se han trasladado desde el Parlamento Europeo en helicóptero a la ciudad alemana de Espira, donde será enterrado tras una misa funeral en la catedral.
Kohl, que fue jefe del Gobierno alemán entre 1982 y 1998, está considerado uno de los principales impulsores de la integración europea y de la unificación alemana.