Celebración frente al Louvre. Tras conocerse la holgada victoria de Emmanuel Macron con el 65,5% de los sufragios, la alegría y el entusiasmo no se hicieron esperar frente al icónico museo de la capital francesa. Las banderas francesas y europeas no cesaron de ondear, conscientes de que el peligro del Frente Nacional había sido nuevamente burlado.
En la plaza, todo según lo previsto. Preparadas las actuaciones musicales de los grupos Magic System o Chris Cab, que acompañados con vítores y coros de "Macron presidente" amenizan la velada festiva.
En las televisiones, reacciones dispares. A las caras largas de los cuadros de la formación ultraderechista de Marine Le Pen se sumaban las sonrisas de los miembros de En Marche. El resto de intervinientes, como la ministra de educación Vallaud-Belkacem o la portavoz de la campaña de Jean-Luc Melenchon, restaban peso a la elección y se centraban en las elecciones legislativas de junio, que podrán determinar la holgura o el bloqueo del nuevo gobierno de Macron.
Sobre estas elecciones legislativas, el portavoz de En Marche, Benjamin Griveaux, defendía que Emmanuel Macron se encontraba deseoso de ponerse manos a la obra y trabajar para conseguir un buen resultado en la Asamblea Nacional para poder tomar decisiones con libertad. En referencia a la formación del nuevo gobierno y quién ocupará cada cartera ha preferido no adelantar nada.
El vicepresidente del Frente Nacional, también presente en los medios, se lamentaba de la victoria del centrista. Elogiaba el resultado del Frente Nacional con sus 11 millones de votos y presentaba el nuevo ejecutivo como un peligro comunitarista abiertamente inclinado hacia la Unión Europea, lo cual no agrada demasiado en las filas frentistas.
A cierta distancia de las televisiones, frente al cuartel general de En Marche, numerosos militantes se agolpaban a sus puertas agitando globos y esperando que el candidato, ya presidente, saliese a hablar tras la victoria. En el momento de escribir estas líneas, Macron no había salido todavía a hacer una valoración pública de los resultados.
Matteo Renzi, el que fuera presidente del Consejo de Ministros de la República italiana hasta el pasado mes de diciembre, ha dicho en la red social Twitter que "la victoria de Macron escribe una extraordinaria página de esperanza para Francia y Europa". Por su parte, el presidente del gobierno español felicitaba a su vez a Macron y le invitaba a colaborar con España para lograr una Europa estable, próspera e integrada.