Un nuevo terremoto de 4,8 de magnitud en la escala Richter ha vuelto a sacudir a primera hora de este viernes las zonas del Italia ya afectadas por el devastador seísmo del miércoles, causando nuevos derrumbes, pero ningún daño a los equipos de rescate que siguen trabajando en la búsqueda de personas bajo los escombros, según informa Efe.
La tierra no dejó de temblar en toda la noche y se produjeron más de 60 réplicas de una magnitud de entre 3 y 4, durando más de un minuto, según los datos del Instituto Italiano de Geofísica y Vulcanología.
Los nuevos temblores han causado ulteriores derrumbes sobre todo en Amatrice, ya completamente devastado por el terremoto de magnitud 6.0 del 24 de agosto. Los equipos de rescate han continuado toda la noche buscando personas bajo los escombros tanto en Amatrice como en Pescara del Tronto, las localidades donde aún se cree hay desaparecidos.
Crece el balance de víctimas
El número de muertos por el terremoto ha aumentado hasta los 267 tras un nuevo recuento y se teme que haya aún más fallecidos entre los escombros de algunas de las localidades más afectadas.
Mientras, más de 1.000 evacuados han pasado una segunda noche en las tiendas de campaña y gimnasios puestos a disposición por la Protección Civil para las personas que han perdido sus casas. Estas personas han vuelto a pasar una noche de terror ya que los seísmos han sido fuertemente advertidos.