El padre Ali David Sonboly que el viernes mató a nueve personas en un centro comercial de Múnich alertó a la policía tras reconocer a su hijo en uno de los primeros vídeos que comenzaron a circular en internet sobre la matanza.
Según informó en rueda de prensa el presidente de la Oficina de Investigación Criminal de Baviera, Robert Heimberger, el padre se dirigió a una comisaría de policía para informar de sus sospechas.
El vídeo en el que le reconoció fue ampliamente difundido en la tarde del viernes por las redes sociales y los medios de comunicación y en él se ve al joven salir de un restaurante de comida rápida y comenzar a disparar a los viandantes.
La policía ha confirmado la autenticidad de otro de los vídeos más difundidos, en el que el joven aparece sobre la azotea de un aparcamiento e intercambia gritos con un vecino que le grababa desde un balcón.
El sonido del vídeo no es bueno y, según la transcripción realizada por el diario Süddeutsche Zeitung, el joven se define como alemán, de un barrio de Hartz IV y grita: "Por vosotros he sufrido mobbing durante siete años; tuve que comprarme un arma y mataros a todos".
Conexión con Breivik
El ministro de Interior de Baviera confirmó que el joven había recopilado documentación sobre otras matanzas e incluso había llegado a visitar la localidad de Winnenden, donde un chico de 17 años asesinó en 2009 a 15 personas de su antiguo colegio.
Joachim Herrmann, aseguró en declaraciones a la emisora regional BR la obsesión del joven germano-iraní "desde hace mucho tiempo" con este tipo de matanzas sangrientas, como la protagonizada también por el noruego Anders Behring Breivik.
El autor del tiroteo del viernes en Múnich se había bajado también de Internet textos de Breivik, el ultraderechista noruego que hace justo cinco años cometió un doble atentado en Oslo y en la vecina isla de Utøya y mató a 77 personas.
Fobia social, ansiedad y depresión
La masacre del viernes en Múnich ha abierto un debate en Alemania sobre el control de armas. Miembros del Gobierno han anunciado un endurecimiento de las leyes. Ali David Sonboly compró la pistola de forma ilegal a través de 'darknet', es decir, por internet, pero utilizando conexiones encriptadas, y el arma procedía de República Checa o Eslovaquia, ha revelado el ministro.
La Fiscalía alemana informó este domingo de que el joven sufría "fobia social", estaba en tratamiento psiquiátrico por ansiedad y depresión y tenía medicamentos en casa, aunque no se sabe si los estaba tomando.
En 2015 el joven había estado ingresado dos meses y ahora se encontraba en tratamiento ambulatorio por sus "fobias sociales", ya que le generaba ansiedad entrar en contacto con otras personas. Además, en 2012 fue víctima de un episodio de acoso escolar, pero la Policía no quiso relacionar de forma directa este caso con el ataque y precisó que los compañeros implicados entonces no están entre las víctimas.
La mayoría de sus víctimas fueron adolescentes: cinco de los muertos tenían menos de 16 años y otros tres menos de 20. Tres son turcos, tres albaneses y uno griego. Según la Policía, Sonboly trató de atraer a adolescentes al McDonald’s donde comenzó el tiroteo hackeando una cuenta de Facebook en la que se prometía comida gratis a todo el que se presentara en la hamburguesería a las 16 horas. Los disparos comenzaron unas dos horas después.
Sonboly era hijo de refugiados que llegaron a Alemania en la década de 1990. Los vecinos lo consideraban un chico tímido que no dio ningún indicio de comportamiento violento. Durante el registro de la casa de la familia, la Policía ha encontrado recortes de tiroteos y un libro sobre tiroteos en centros educativos estadounidenses titulado Por qué matan los menores: dentro de la mente de los pistoleros de escuela.