El primer ministro francés, Manuel Valls, consideró "innegable" que el atropello masivo en Niza "es un ataque terrorista", al tiempo que insistió en que hay una "guerra" declarada contra Francia.
"Nos han declarado la guerra pero la vamos a gestionar nosotros", afirmó, en una entrevista concedida a la televisión francesa, repitiendo las palabras del presidente galo, François Hollande, tras los atentados de París.
Para Valls es "innegable" que estamos ante un atentado. El conductor del camión "es un terrorista vinculado sin duda al islamismo radical de una manera o de otra", dijo sobre Mohamed Lahouaiej Bouhlel, aunque la investigación aún no ha revelado conexiones de este tipo.
Interrogado sobre posibles fallos de seguridad en Niza -el camión recorrió dos kilómetros por una zona restringida al tráfico de vehículos-, Valls lo negó, subrayando que"no se puede garantizar el riesgo cero".
Aprovechó para advertir en contra de "hacer una causa" contra las fuerzas de seguridad en el marco de esta ola de atentados en Francia porque lo que pretenden los terroristas es "dividir", por lo que ha instado a "hacer bloque en torno a nuestros valores".
No obstante, se mostró comprensivo con la "ansiedad" de la ciudadanía. "Han atacado a Francia el día de la fiesta nacional ¿por que? Porque somos el país de la libertad, la igualdad y la fraternidad. Porque somos un país que cuenta", afirmó.
Cautela de Bernard Cazeneuve
Sus declaraciones contrastan con las del ministro francés del Interior, Bernard Cazeneuve, que dijo que de momento no existe ningún elemento que permita vincular con el yihadismo a Mohamed Boulhel.
"Tenemos un individuo que en absoluto era conocido por los servicios de información por actividades ligadas al yihadismo radical, que no era objeto de una ficha S (de seguimiento por radicalización), y al que no se le conocían actos vinculados con el islam radical", dijo el titular de Interior en la cadena TF1.
Cazeneuve indicó en el telediario de máxima audiencia de esa cadena que la investigación judicial abierta determinará si Boulhel, abatido tras la masacre, actuó a petición de otros individuos, impulsado "por los continuos mensajes del Estado Islámico" o por tener algún tipo de desequilibrio.
"Nos enfrentamos a fenómenos de violencia extrema. Hemos constatado que las modalidades de esos crímenes son inéditas respecto a lo conocido hasta ahora. Hemos tenido matanzas masivas con explosivos, con armas de fuego, y ahora un nuevo tipo de intervención", indicó Cazeneuve.
El ministro subrayó que "es algo que preocupa a las autoridades públicas", porque se ha llegado "a tal nivel de paroxismo de violencia que para proteger a los franceses hace falta abarcar todos los comportamientos más violentos, irracionales y mortales e intentar evitar que se reproduzcan a través de la anticipación".