Un especie de Minority Report, pero con un rapero musulmán que utiliza el humor para impedir futuros crímenes. Scotland Yard ve en un youtuber británico un arma eficaz contra la radicalización en las escuelas. En cinco años, sus vídeos han recibido más de 65 millones de visitas. Humza Arshad se ha convertido en una estrella que pasa de móvil a móvil entre los adolescentes británicos. Y un día, hace tres años, la policía llamó a su puerta.
"Me propusieron colaborar con ellos para prevenir la radicalización de los chavales en los colegios. Acepté porque soy musulmán y británico, y me siento orgulloso de ello. Como musulmán, quiero demostrar al mundo que somos gente normal", cuenta Arshad a El País.
Y es que cerca de 600 jóvenes británicos se han unido a la guerra en Siria. Y en la mayoría de los casos el proceso de radicalización pasó inadvertido en su entorno. "No les digo que no defiendan aquello en lo que creen", explica. "Les animo a defenderlo, pero no con violencia", explica al periódico de Prisa.
Una vez que el show termina, los estudiantes hacen cola para hacerse selfies con él.