Enrique Navarro, consultor independiente, y asesor de Defensa e interventor del Ministerio de Defensa durante los gobiernos de José María Aznar, explica en esRadio algunos de los detalles técnicos sobre la catástrofe aérea en Ucrania.
Para empezar, el experto ha detallado que para el atentado lo más probable es que se haya utilizado el sistema de misiles tierra-aire BUK.
Se trata de un sistema que lleva más de treinta años establecido en el país, y que aunque requiere conocimientos y un entrenamiento previo para utilizarlo, Navarro apunta que "muchos ex militares ucranianos se han unido al bando separatista", por lo que no sería de extrañar que "entre los prorrusos haya efectivos con los conocimientos para manejar el sistema BUK".
A continuación, el experto en materia de defensa ha señalado que desgraciadamente, "es relativamente sencillo derribar una aeronave comercial aunque vaya a 10.000 metros de altura".
El BUK es un sistema que detecta su objetivo por radar, y la señal que desprende un Boeing 777 le convierte en un blanco que es casi imposible de fallar. "El proyectil iría directo al objetivo con muy poco margen de error", clarifica el experto.
Asimismo, Navarro considera que la aeronave no puede haber sido abatida por error o por confundirla con un avión de combate: "La señal que emite un Boeing es bastante característica, por lo que cualquier persona con conocimientos básicos del manejo de un radar reconocería que se trata de un avión comercial, y de gran tamaño".