El presidente de Francia, François Hollande, consideró este viernes que la concesión del premio Nobel de la Paz a la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) supone un espaldarazo a la acción de su país en Siria.
"El premio Nobel consagra todo lo que Francia, y no solo Francia, ha emprendido desde hace varias semanas para denunciar el uso de armas químicas y su eliminación en un futuro próximo", indicó el jefe del Estado en Nanterre, a las afueras de París, donde asistía a un acto público.
Poco antes, a través de un comunicado, el presidente había recordado el uso de armas químicas el pasado 21 de agosto por parte del régimen sirio contra la población civil. "Estos actos de barbarie no deben repetirse nunca jamás. Francia apoya plenamente al OPAQ en su misión esencial de destrucción del arsenal sirio en el marco de la resolución 2118 del Consejo de Seguridad de la ONU", indicó. Hollande prometió apoyar la acción y la promoción de la cooperación internacional en el terreno del uso pacífico de la química.