El hijo de Joe Biden vuelve a estar en el ojo del huracán. A pocas horas de que su padre firme el cargo como presidente de EEUU, el Comité del Senado de Defensa Nacional ha desclasificado la conclusión de una investigación comenzada en septiembre de 2020. En el informe final de 84 páginas y titulado "Hunter Biden, Burisma y corrupción" se confirma que Hunter Biden hizo negocios con miembros de la élite empresarial ligados estrechamente con el Partido Comunista Chino, mientras su padre era vicepresidente del país en la Administración de Obama. Biden padre estaría al corriente de todo y, es más, habría aprovechado su cargo para influir en los empresarios chinos, según las pesquisas del Comité del Senado.
Está desclasificación, ordenada por Donald Trump, concluye lo que varios medios americanos habían alertado, pese a que Biden padre lo negara rápidamente. En la relación al informe, el todavía presidente de EEUU había transmitido en estos últimos meses que Hunter Biden y Joe Biden estaban relacionados con asuntos turbios en China y Ucrania.
Cabe recordar que Lindsey Graham, presidente del Poder Judicial del Senado, ya había pedido al fiscal William Bar, antes de su dimisión, que investigara al hijo del demócrata y a su familia por tratos comerciales problemáticos con China, Rusia y otras naciones que podrían afectar a la política exterior de la administración Biden. Sobre ello, los senadores republicanos habían comunicado que los abogados de Hunter Biden y el hermano de Biden, James Biden, se negaban a cooperar con los esfuerzos de su investigación.
Ahora, los documentos desclasificados van en la misma línea de las informaciones previamente publicadas por el diario americano Breibart. El digital desveló correos electrónicos obtenidos de un socio comercial de Hunter Biden, que describen cómo el hijo de Biden y sus colegas utilizaron su acceso a la administración Obama-Biden, para negociar con inversionistas chinos y funcionarios del Partido Comunista.
El 15 de octubre, el New York Post también comenzó a publicar emails que destaparían el escándalo que envuelve a los Biden. Según los mensajes, Hunter Biden buscó acuerdos lucrativos que involucraban a la compañía privada de energía más grande de China, entre otras empresas capitaneadas por el PCCh.
Y tal como apunta el informe actual del Senado, Hunter Biden realizó las negociaciones durante la Administración de Obama, cuando su padre Joe Biden era vicepresidente de EEUU. No obstante, sus contactos con China habrían continuado después de que finalizara el mandato de los demócratas.
En los documentos se refleja que las negociaciones de Hunter Biden en China comenzaron en el 2009. El Comité de investigación del Senado de Seguridad Nacional asevera que "la regulación federal prohíbe a los empleados del gobierno federal usar sus cargos públicos para beneficio privado o para beneficio privado de familiares", como es el caso de la familia Biden. "Este reglamento también busca garantizar que el desempeño de funciones oficiales no dé lugar a la apariencia de uso de cargo público para beneficio privado o de trato preferencial", se explicita.
Además de China, el hijo de Biden también ha utilizado la influencia de su padre para realizar negocios oscuros con empresas ucranianas, según recoge los archivos del Senado. Cabe recordar que diarios como New York Post estuvieron inmersos en una campaña de censura por publicar los supuestos negocios turbios de Hunter Biden. Facebook hasta llegó a eliminar la página del diario americano.
Breibart continuó el hilo del New York Post, llegando a confirmar que Joe Biden sostuvo una reunión privada y extraoficial con inversores chinos y funcionarios del Partido Comunista de China en la Casa Blanca para beneficiar los negocios de su familia, según denunció el 16 de octubre de 2020.
Hay que destacar que el hijo de Biden también ha estado envuelto en problemas fiscales que salieron a la luz a través de su exesposa. De acuerdo con un documento judicial, su exmujer Kathleen pidió a un tribunal del Distrito de Columbia en 2017 que congelara los activos de Hunter, alegando que "creó preocupaciones financieras para la familia al gastar de manera extravagante en sus propios intereses incluyendo drogas, alcohol, prostitutas, clubes de striptease y regalos para mujeres con las que tiene relaciones sexuales".
Y, al igual que se silenciara la trama de los Biden desde que estallara en otoño de 2020, el mainstream mediático ha vuelto a ocultar esta última desclasificación de documentos que compromete de lleno al nuevo presidente de EEUU y a su hijo. Estos antecedentes de los demócratas con el Partido Comunista Chino siempre han preocupado a Trump. No es de extrañar que, días después de que se certificara a Biden como ganador de las elecciones, el mandatario republicano reforzara la prohibición a los inversores estadounidenses de financiar empresas vinculadas al Ejército de Liberación Popular de China. No hay que olvidar que, en octubre de este último año, Xi Jinping se dirigió a su ejército y les comunicó que "estuvieran preparados para la guerra".