"Con el corazón lleno de gratitud y un optimismo sin límites, acepto profundamente esta nominación para la Presidencia de Estados Unidos", dijo Donald Trump en su discurso ante la Convención Nacional Republicana, pronunciado en directo en el jardín sur de la Casa Blanca ante alrededor de 1.500 personas.
Trump comenzó su discurso recordando a las seis víctimas del huracán 'Laura' a su paso por Lousiana, así como a su recién fallecido hermano, Robert Trump, poco después de haber aceptado oficialmente su candidatura a las elecciones del próximo 3 de noviembre, tras ser presentado por su hija Ivanka.
Durante su intervención, Trump prometió que en caso de ser reelegido continuará con las políticas económicas que lograron una "prosperidad récord" en Estados Unidos antes de la llegada de la pandemia y apeló al patriotismo del pueblo estadounidense para lograr situar al país en el lugar de la historia que le corresponde.
Además, defendió su gestión de la pandemia estos últimos meses asegurando que todas las medidas que se han llevado a cabo han estado basadas "en la ciencia, los datos y los hechos", no como Joe Biden, dijo, que en caso de haberle escuchado, "cientos de miles de estadounidenses más habrían muerto".
El presidente comenzó de esta manera los ataques a su rival demócrata, a quien acusó de "rendirse al virus", proponiendo el cierre de la economía de Estados Unidos durante la crisis sanitaria, lo que hubiera provocado ha dicho, un "aumento de sobredosis de drogas, depresión, adicción al alcohol, suicidios, ataques cardíacos, devastación económica, pérdida de empleo y mucho más".
Trump agregó que en caso de ser elegido Biden, éste llevará a la Casa Blanca un "movimiento represor" y "socialista" que "demolerá" el destino de EEUU y el sueño americano. "Estas son las elecciones más importantes de la historia de este país (...). Estas elecciones decidirán si salvamos el sueño americano o si permitimos que una agenda socialista demuela nuestro querido destino", dijo el mandatario.