El centro de Estados Unidos está empezando a sufrir la peor ola de frío en 25 años. Un fenómeno atmosférico conocido como vórtice polar, una masa de aire frío situada sobre el Polo Norte que se desplazará en las próximas horas hacia latitudes más bajas, está haciendo descender bruscamente los termómetros. Las autoridades alertan de heladas "brutales" que pueden poner en peligro a los ciudadanos.
If there's a day where one needs to demonstrate cold weather safety to the max, it is Wednesday. The Arctic air will be fully entrenched. Temperatures remain in negative double digits for most areas the entire day. Wind chills -40° to -55°. #ILwx #INwxhttps://t.co/d9uKYzeUsQ pic.twitter.com/LVAWtRidxX
— NWS Chicago (@NWSChicago) January 29, 2019
Una docena de estados, entre ellos Minnesota, Iowa, Wisconsin, Dakota del Norte y Dakota del Sur e Illinois, registrarán rachas de viento extremadamente frío de hasta -50º. El servicio meteorológico alerta de que pueden congelar la piel en tan sólo diez minutos y avisa de unas temperaturas "potencialmente mortales". En Chicago, las máximas no superarán los -11 grados y el ayuntamiento ha instalado estufas en los andenes y han habilitado instalaciones para gente sin recursos.
Con unas mínimas de hasta 30 y 40 grados menos de lo habitual en un mes de enero, las autoridades de varias ciudades estadounidenses están pidiendo a los vecinos que tomen precauciones, entre ellas evitar viajar, asegurarse del buen estado de sus sistemas de calefacción y de sus vehículos, hacer acopio de alimentos y minimizar el tiempo de exposición al frío. Desde Emergencias, recuerdan las señales de congelación: hormigueo, palpitaciones y adormecimiento en los dedos de manos y pies, orejas y nariz.
La ola de frío polar no comenzará a remitir hasta el viernes. Hasta entonces, dejará datos de récord: muchas ciudades sufrirán las máximas más bajas de su historia o permanecerán bajo cero más horas que nunca.