El Departamento de Estado norteamericano ha informado de que Estados Unidos se retirará de forma efectiva de la Organización de las Naciones Unidas para Ciencia y la Cultura (Unesco) a partir del 31 de diciembre.
El comunicado estadounidense explica que Washington "desea seguir vinculado a la Unesco, pero solo como Estado observador no miembro".
La retirada se debe al al impago de las contribuciones de los países miembros de la Unesco, la necesidad de reformar de la organización y el ambiente antiisraelí en el organismo, que ha llevado a decisiones absolutamente disparatadas como negar la vinculación del pueblo judío con el Monte del Templo de Jerusalén.
Funcionarios del Departamento de Estado también aclararon que Washington tomó la decisión después de una larga disputa en la UNESCO sobre la pertenencia de Palestina como Estado miembro.
Israel también se va
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, también ha anunciado este jueves que ha dado orden de iniciar los preparativos para que el país abandone la Organización de las Naciones Unidas para Ciencia y la Cultura (Unesco) y sigue así a Estados Unidos.
El representante de Israel ante la Unesco, Carmel Shama-Hacohen, había recomendado poco antes de conocerse la orden de Netanyahu la salida del país de la Unesco. "En los últimos años, la Unesco se ha transformado en una organización extraña que ha perdido la senda profesional en pro de los intereses políticos de ciertos países", ha argumentado, según declaraciones que recoge el diario Yedioth Aharonoth y de las que se hace eco Europa Press.
"Mi recomendación personal al primer ministro Benjamin Netanyahu es que se una a Estados Unidos y se retire de inmediato de la Unesco", ha apostillado Shama-Hacohen.