El presidente de EEUU, Donald Trump, anunció este viernes la "cancelación" de la política de Barack Obama hacia Cuba y se mostró dispuesto a negociar "un acuerdo mejor" con la isla, pero solo si hay avances "concretos" hacia la celebración de "elecciones libres" y la liberación de "prisioneros políticos".
"Con efecto inmediato, cancelo la política unilateral de la Administración anterior hacia Cuba", dijo Trump, que justificó la medida en la necesidad de frenar la "opresión comunista".
"La nueva política reafirma el embargo" comercial, económico y financiero que Estados Unidos impuso a Cuba en los años 60, estrechando el cerco sobre los negocios controlados por la élite militar. También aumenta el control sobre los viajes de estadounidenses a la isla caribeña.
No obstante, la Casa Blanca ha decidido mantener el restablecimiento de las relaciones diplomáticas, que permitió abrir de nuevo las embajadas, así como los viajes de familiares y las remesas que los cubanoamericanos envían a sus parientes.
"Cuando los cubanos den pasos concretos, estaremos listos, preparados y seremos capaces de volver a la mesa para negociar ese acuerdo, que será mucho mejor", dijo Trump desde Miami. "Retamos a Cuba a venir a la mesa con un nuevo acuerdo que esté en el mejor interés tanto de su pueblo como del nuestro", insistió.
En su intervención, Trump aseguró que Cuba sufre desde "hace décadas" al régimen de Castro, pero que eso no debe repetirse en Venezuela. Dijo que siguen de cerca las denuncias sobre los crímenes del "brutal" régimen de los Castro, y "es importante que haya libertad, ya sea en Cuba o en Venezuela".
La situación de los disidentes ha empeorado
Según Trump, en estos tres años de deshielo la situación de los disidentes no ha hecho más que empeorar a pesar del diálogo entre Washington y La Habana.
El magnate neoyorquino destacó "el sufrimiento de los cubanos" de las últimas décadas y prometió que, como nuevo presidente de Estados Unidos, no guardará silencio: "Denunciaré los crímenes del régimen de Castro (...) Sabemos lo que pasa y recordamos lo que pasó".
Trump agradeció al exilio cubano que sea la "voz de los que no la tienen", y dijo que, con ello, hacen la diferencia en la lucha para acabar con la persecución y con una "ideología depravada" como la que hay en Cuba. En este sentido, el republicano dijo que saben lo que está pasando en la isla y recuerdan lo que ha pasado, y que eso les lleva a cambiar su política hacia Cuba.