El juez federal de Hawái Derrick Watson ha emitido este miércoles una orden bloqueando la orden ejecutiva aprobada el 6 de marzo por el presidente estadounidense, Donald Trump, por la que se veta la entrada en Estados Unidos a los ciudadanos de seis países de mayoría musulmana y se restringe drásticamente el número de refugiados que acepta el país cada año.
El fallo es la segunda derrota para el decreto migratorio de Trump, después de que un tribunal federal de Seattle bloqueara la primera versión del mismo en febrero. En respuesta, el mandatario cargó duramente contra la Justicia, si bien abandonó finalmente el proyecto.
El segundo veto migratorio fue aprobado unas semanas después, con la retirada de algunos de los elementos más controvertidos, y excluyendo de la lista de países a Irak. En el segundo documento figuran como países vetados Somalia, Irán, Siria, Sudán, Libia y Yemen.
Sin embargo, los estados gobernados por el Partido Demócrata y varias organizaciones civiles acudieron a los tribunales afirmando que el nuevo documento era una versión similar al anterior.
Los abogados del Gobierno han argumentado que Trump estaba ejerciendo sus poderes de seguridad, resaltando que no había nada en la orden, tal y como estaba escrita, que implicara un filtro para los viajeros a causa de su religión.
El veto migratorio original causó escenas de caos en los aeropuerto sdel país debido a que fue emitido un viernes por la tarde y no hacía distinción entre aquellas personas con 'tarjeta verde' y las que no tenían este documento, dejando a miles de personas bloqueadas en las fronteras.
Trump afirma que ganará la batalla
El presidente de EE.UU., Donald Trump, alertó este miércoles, minutos después de saber que su nuevo veto migratorio también fue bloqueado por la Justicia, que llevará esa batalla legal hasta el Tribunal Supremo y que saldrá victorioso.
"Vamos a pelear contra este terrible fallo (el de este miércoles), vamos a llegar hasta el Tribunal Supremo, vamos a ganar y vamos a mantener seguros a nuestro país y a nuestros ciudadanos", dijo Trump durante un mitin en Nashville (Tennessee).
Trump respondió así a la decisión del magistrado Derrick Watson, con sede en Honolulu (Hawai), que dejó este miércoles sin efecto su medida, con la que pretendía suspender a partir de esta medianoche la entrada al país de inmigrantes de seis países de mayoría musulmana y de todos los refugiados.
El presidente calificó el fallo de Watson como "un exceso judicial sin precedentes" y reiteró que la Constitución le otorga poderes para suspender la inmigración en pro de la seguridad nacional.
Además, anticipándose a que los recursos que el Gobierno presente ante el correspondiente Tribunal de Apelaciones del Circuito Noveno -una corte que Trump considera politizada- puedan fracasar, advirtió de que llevará la batalla legal hasta el Supremo.
"Creo que debemos volver al primer (veto) y recorrer todo el camino (hasta el Supremo). Esto es lo que quería hacer en primer lugar", dijo el presidente.