"Se lo diré en su momento. Voy a mantener el suspense", respondió Donald Trump interpelado por el moderador del último debate presidencial en Las Vegas, Chris Wallace, por si aceptará el resultado de la contienda.
El magnate neoyorquino alertó de que hay "millones de personas registradas para votar que no deberían estar registradas para votar", al alimentar sus acusaciones de que las elecciones están amañadas en favor de Clinton.
Este rechazo de Trump choca con las declaraciones de su candidato a vicepresidente, Mike Pence, que aseguró que tanto él como su jefe de filas "aceptarán el resultado de las elecciones y la voluntad del pueblo estadounidense". Su hija, Ivanka Trump, también afirmó este miércoles que su padre "hará lo correcto" y se mostró confiada en que reconocerá la victoria de Clinton si sale derrotado de las urnas.
Hillary Clinton, por su parte, criticó que Trump, con sus continuas insinuaciones de que las elecciones están amañadas de antemano, "debilita la democracia" estadounidense. El magnate neoyorquino también sugirió que las elecciones están manipuladas por el sesgo de los medios de comunicación.
Señala a Clinton de estar detrás de las acusaciones
Por otro lado, Trump acusó a Clinton de estar detrás de las acusaciones de abuso sexual que han hecho contra él varias mujeres en las últimas semanas y reiteró que se trata "de historias falsas y ya desacreditadas". "Es la única manera. Esas historias son totalmente falsas, ni siquiera le pedí perdón a mi mujer porque no hice nada, no las conozco, quieren fama o fue su campaña (la de Clinton) la que lo hizo", afirmó.
En el turno de respuesta, la demócrata recordó la secuencia de la polémica de las denuncias de los abusos sexuales, que se desató después de la publicación de una grabación de 2005 en la que Trump se jacta de poder hacer lo que quiere con las mujeres en el plano sexual. "Oímos lo que Donald Trump dijo que hizo a las mujeres y después las mujeres vinieron y lo dijeron", apuntó Clinton, recordando que la ola de denuncias siguió al vídeo.
La demócrata recordó además que el empresario, en mítines posteriores, llegó a decir que algunas de las mujeres que le acusan ni siquiera son lo suficientemente atractivas como para que él intentara algo con ellas. El empresario negó este extremo y Clinton continuó sentenciando que "Donald Trump cree que denigrar a las mujeres le hace más grande".
Trump insiste en el muro
En el momento de entrar en temas relacionados con la inmigración, el candidato republicano insistió en la construcción de un muro que separe EEUU de México, mientras que su rival demócrata dijo que bajo su presidencia no habrá "fronteras abiertas". "Quiero el muro, tenemos que detener las drogas. Tenemos a hombres malos que se tienen que ir. Cuando la frontera esté segura vamos a tomar una decisión sobre lo demás", dijo Trump.
Clinton, por su parte, negó que quiera "fronteras abiertas", tal y como reveló la organización Wikileaks al filtrar recientemente un discurso privado y pagado de la ex primera dama, y aseguró que lo que pretende es una frontera segura y una reforma migratoria. La candidata demócrata, además, acusó al magnate neoyorquino de querer separar familias al deportar a padres inmigrantes con hijos nacidos en Estados Unidos.
Clinton alertó de que si la fuerza de deportación de Trump se pone en práctica habrá agentes buscando a los once millones de indocumentados que hay en el país "escuela por escuela" y "negocio por negocio", además de autobuses y trenes llenos para expulsarlos de Estados Unidos. En su turno, Trump acusó a Clinton de haber votado a favor del muro en el pasado, cuando era senadora, y de cambiar de opinión "porque nunca logra hacer nada".