Según informó Air France, uno de los aviones -un Boeing 777-300- había despegado desde el aeropuerto de Dulles (Virginia, cerca de Washington, D.C.) y fue desviado hacia Halifax (Nueva Escocia, Canadá). Peter Spurway, vicepresidente del aeropuerto, informó a CNN que los 298 pasajeros y la tripulación del vuelo AF55 fueron trasladados a la terminal.
El segundo de los vuelos (AF65) había partido de Los Ángeles en la costa oeste y fue desviado a Salt Lake City (Utah). Según algunas informaciones, se trata de un avión Airbus A380 con más de 400 pasajeros que iba hacia París, al aeropuerto Charles de Gaulle, el mismo destino del avión desviado a Halifax.
En declaraciones a CNN, el agente especial del FBI de Salt Lake City, Todd Palmer, señaló que "varias agencias de seguridad están trabajando para determinar la naturaleza de las amenazas". Por su parte, Preston Schlachter, portavoz del NORAD (Mando Norteamericano de Defensa Aeroespacial, por sus siglas en inglés), informó de que ningún avión militar fue desplegado en alguno de los incidentes de los vuelos de Air France.