El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, supervisa este martes desde la sala de crisis de la Casa Blanca las operaciones federales de apoyo a los esfuerzos en estados y ciudades para paliar los devastadores daños causados por el huracán Sandy.
En una videoconferencia Obama recibió los últimos informes sobre la situación, acompañado por el vicepresidente, Joe Biden; la secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano, y el director de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA), Craig Fugate.
"El presidente expresó su preocupación por los afectados por la tormenta, así como por los heroicos voluntarios que respondieron primero de manera desinteresada para proteger a los miembros de sus comunidades", indicó la Casa Blanca en un comunicado. Además, Obama señaló su consternación por la pérdida de vidas a causa de la tormenta.
Antes, el presidente estadounidense declaraba "zona catastrófica" las áreas de Nueva York y Nueva Jersey afectadas por los fuertes vientos y anegadas por la marejada. La declaración, difundida por la Casa Blanca, pone a disposición de los gobiernos y comunidades locales los fondos, equipos y personal del Gobierno Federal necesarios para afrontar las consecuencias del desastre y socorrer a los damnificados por la tormenta, que ha matado en EEUU a 17 personas.
Al menos 15 muertos en Nueva York
Según el gobernador del estado de Nueva York en ese territorio hubo al menos 15 muertos incluyendo los 10 que se han registrado en la ciudad, de los que informaron las autoridades neoyorquinas. A esos 15 se añaden, según la CNN, al menos otros seis, fallecidos en varios de los estados del nordeste afectados por el devastador huracán.
El presidente recibió también información actualizada sobre la evolución del ciclón y el impacto causado sobre la Costa Este, así como del despliegue de efectivos y unidades de la Guardia Nacional que han sido repartidas por los estados afectados.
Obama insistió además a su equipo en que su "principal prioridad" es asegurarse de que todos los recursos disponibles llegan lo antes posible al personal de respuesta de emergencias en los estados y los municipios, y que las deficiencias sean resueltas a la mayor brevedad. "El presidente insta a los estadounidenses a que continúen siguiendo las instrucciones y consejos de los funcionarios locales, gobernadores y alcaldes", con muchos de los cuales Obama hablará a lo largo del día.
Junto a Obama, que ha cancelado también sus actos de campaña de mañana para continuar pendiente de las consecuencias del paso de Sandy, también estuvieron sus secretarios de Defensa, Leon Panetta; Energía, Steve Chu; Transporte, Ray Lahood, y del Tesoro Timothy Geithner.
Precisamente Geithner fue el encargado de informar a Obama sobre las condiciones de los mercados financieros y los primeros impactos económicos del huracán, cuyas pérdidas han sido estimadas en unos 20.000 millones de dólares.
Una semana para que vuelva la luz
Por otra parte, el suministro de luz podría tardar una semana en ser restablecido en la mayoría de vecindarios del sur de Manhattan, que sufrieron un apagón el lunes por la noche a causa de "Sandy", según informó Con Edison, la compañía de abastecimiento eléctrico de Nueva York.
El vicepresidente de operaciones eléctricas de Con Ed, John Miksad, aseguró al canal de televisión local NY1 que restablecer el suministro de luz podría demorarse una semana, aunque puntualizó que todavía no es posible avanzar un calendario exacto, dado que tienen que investigar el alcance de los daños ocasionados por la explosión en la subestación de la calle 14.
Esta explosión dejó sin suministro aproximadamente a 25.000 personas residentes por debajo de la calle 39 de la isla de Manhattan, y Con Ed la atribuye a las inundaciones o a escombros que salieran despedidos e impactaran contra ella, pero todavía se están investigando las causas.
Miksad explicó que la empresa esperaba grandes inundaciones, pero que fue sorprendida por un aumento repentino de la marea que desbordó todas sus previsiones. "Nadie esperaba eso. Estamos un poco en un territorio inexplorado", aseveró el directivo de esta compañía de servicio público. Por otro lado, Miksad avanzó que los vecindarios de Manhattan que se encuentren hacia el sur del puente de Brooklyn, y que no dependen de la subestación afectada, recuperarán el flujo eléctrico en tres o cuatro días.
La 'tormenta perfecta'
A su paso por el Caribe, como huracán, Sandy causó decenas de muertes, y ha dejado por lo menos 17 muertos en EEUU y uno en Canadá desde que tocó tierra en Nueva Jersey el lunes por la noche convertido en tormenta. La llegada a tierra firme de Sandy con vientos sostenidos de 125 kilómetros por hora, levantó marejadas de hasta cuatro metros en áreas de Nueva Jersey y Nueva York.
De momento, la reducción del nivel de las aguas, que gracias al descenso de la marea han bajado casi dos metros en el Bajo Manhattan desde su punto culminante, ha relajado un poco la situación, si bien algunas rachas de viento que todavía persisten hoy, próximas a los 100 kilómetros por hora, recuerdan que Sandy sigue cerca.
Nueva York y su área metropolitana (19 millones de habitantes) amanecieron este martes sin transporte público, con importantes interrupciones del suministro eléctrico y con todos los aeropuertos y casi todos los puentes y túneles de la ciudad cerrados.
Las escuelas, universidades, museos, grandes sedes empresariales, la sede de Naciones Unidas y la bolsa de Nueva York seguirán cerradas hoy, lo que contribuirá a aligerar el tráfico. Sandy, además, ha paralizado casi totalmente la campaña electoral del presidente Barack Obama, que busca la reelección, y del republicano Mitt Romney.
Los comicios están fijados para el martes 6 de noviembre, aunque millones de ciudadanos han votado ya por anticipado.