L D (EFE) “Obtuvimos la victoria en el pasado y la tendremos al final en la Madre de todas las batallas”, dijo el presidente iraquí en un mensaje a la nación, difundido este martes por los medios de comunicación locales. Sadam Husein aludía a la guerra irano-iraquí (1980-88), en la que murieron más de un millón de personas de ambos bandos. También se refería a la Guerra del Golfo, de 1991, que Bagdad denomina como “Madre de todas las batallas”, en la que una coalición multinacional, liderada por EEUU, puso fin a la ocupación iraquí de Kuwait, que duró desde agosto de 1990 a febrero del año siguiente.
Según los iraquíes, esa guerra no ha terminado todavía, debido a cazabombarderos de EEUU y el Reino Unido continúan sus actividades en las zonas de “exclusión aérea” impuestas por esos dos países en el norte y el sur de Irak desde principios de la década de los noventa. El presidente estadounidense, George W. Bush, y varios de sus principales colaboradores se han mostrado decididos a atacar Irak para derrocar al régimen de Sadam Husein, al que acusan de desarrollar armas de destrucción masiva y de formar un “eje del mal”, junto a Irán y Corea del Norte.
Según los iraquíes, esa guerra no ha terminado todavía, debido a cazabombarderos de EEUU y el Reino Unido continúan sus actividades en las zonas de “exclusión aérea” impuestas por esos dos países en el norte y el sur de Irak desde principios de la década de los noventa. El presidente estadounidense, George W. Bush, y varios de sus principales colaboradores se han mostrado decididos a atacar Irak para derrocar al régimen de Sadam Husein, al que acusan de desarrollar armas de destrucción masiva y de formar un “eje del mal”, junto a Irán y Corea del Norte.