L. D. / EFE.- El texto dice que los laboristas "incrementarán aún más los 7.500 millones de dólares adicionales que ya han impuesto en tasas a los empresarios".
Según la misiva, el manifiesto del Partido Laborista incluye propuestas partidarias de una mayor regulación de los negocios y exige a las empresas que consulten a sus empleados antes de anunciar grandes planes de regulación de empleo.
En particular, los empresarios respaldan al portavoz conservador de Economía, Michael Portillo, quien ha avisado de que los planes de los laboristas de incrementar el gasto a un ritmo superior al del crecimiento económico supondrán subidas fiscales.
La carta sale a la luz después de que la semana pasada otro grupo de casi sesenta ejecutivos, incluidos el presidente de Amstrad, Alan Sugar, y Terence Conran, fundador de Habitat, presentara otra en la que se decía que los laboristas beneficiarán a los empresarios.
Los partidos volverán a batallar con las reiteradas promesas de mayores inversiones públicas al menor coste fiscal, al empezar hoy la tercera semana de campaña electoral para los comicios generales que se celebran en el Reino Unido el próximo 7 de junio.
Mientras, los conservadores insistirán en su firme compromiso de reducir los impuestos y las trabas legislativas a los empresarios, los laboristas negarán que vayan a subir los impuestos con tácticas "ocultas" como les acusan los conservadores.
El Partido Laborista, encabezado por el propio primer ministro, Tony Blair, dedicará también la jornada de este lunes a revelar una serie de ambiciosos planes en materia de sanidad.
Entre otros, Blair propone, en el caso de ganar un segundo mandato electoral, un plan de trabajo conjunto entre los profesionales de la sanidad y los fabricantes de aparatos médicos para mejorar los equipos clave en la lucha contra el cáncer.
Según la misiva, el manifiesto del Partido Laborista incluye propuestas partidarias de una mayor regulación de los negocios y exige a las empresas que consulten a sus empleados antes de anunciar grandes planes de regulación de empleo.
En particular, los empresarios respaldan al portavoz conservador de Economía, Michael Portillo, quien ha avisado de que los planes de los laboristas de incrementar el gasto a un ritmo superior al del crecimiento económico supondrán subidas fiscales.
La carta sale a la luz después de que la semana pasada otro grupo de casi sesenta ejecutivos, incluidos el presidente de Amstrad, Alan Sugar, y Terence Conran, fundador de Habitat, presentara otra en la que se decía que los laboristas beneficiarán a los empresarios.
Los partidos volverán a batallar con las reiteradas promesas de mayores inversiones públicas al menor coste fiscal, al empezar hoy la tercera semana de campaña electoral para los comicios generales que se celebran en el Reino Unido el próximo 7 de junio.
Mientras, los conservadores insistirán en su firme compromiso de reducir los impuestos y las trabas legislativas a los empresarios, los laboristas negarán que vayan a subir los impuestos con tácticas "ocultas" como les acusan los conservadores.
El Partido Laborista, encabezado por el propio primer ministro, Tony Blair, dedicará también la jornada de este lunes a revelar una serie de ambiciosos planes en materia de sanidad.
Entre otros, Blair propone, en el caso de ganar un segundo mandato electoral, un plan de trabajo conjunto entre los profesionales de la sanidad y los fabricantes de aparatos médicos para mejorar los equipos clave en la lucha contra el cáncer.