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El alcalde de Cincinnati levanta el toque de queda tras los disturbios raciales

El alcalde de Cincinnati, Charles Luken, ha anunciadoa el fin del toque de queda vigente desde el pasado jueves en esa ciudad del estado norteamericano de Ohio para restablecer el orden tras varios días de disturbios raciales. Al mismo tiempo, se mantiene el estado de emergencia como medida de precaución, ha explicado el funcionario.

Los disturbios estallaron el pasado día 9 a causa de la muerte dos días antes del joven negro Timothy Thomas, de 19 años, tiroteado por un policía blanco. El toque de queda regía desde las 20.00 horas hasta las 06.00 del día siguiente, pero el domingo comenzó más tarde, a las 23.00, debido a la celebración de la Pascua. Desde que comenzaron los disturbios fueron detenidas en Cincinnati 837 personas por participar en actos violentos o infringir el toque de queda.

El fin de esta medida era reclamado con insistencia por los comerciantes -pese al saqueo de decenas de establecimientos durante los disturbios- y se aceptó tras una noche en que imperó la calma en la ciudad, sin apenas incidentes. En una rueda de prensa, el alcalde ha explicado que se creará una comisión ciudadana para "hacer frente a los problemas raciales" y pidió concordia a la población.

"Debemos unirnos, esto es una crisis, pero también una oportunidad histórica para que Cincinnati se convierta en líder de la nación para llevar a cabo importantes cambios", agregó Luken. La muerte del joven negro, que estaba desarmado, será investigada por un gran jurado, por abogados de la sección de derechos civiles del departamento de Justicia y por la policía federal (FBI).

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